Todos sabían lo que se avecinaba pero la nieve ha afectado los planes de viaje de muchas personas en un típico de día de invierno. Típico pero muy repetido porqué es la cuarta nevada en mes y medio y está última parece que va a ser la mayor de todas.
La nieve no sólo ha caído en Nueva York desde la frontera con Canadá hasta el sur de la capital en Washington, los colegios están cerrados, los trenes tienen un servicio muy reducido e incluso en Nueva York los aeropuertos internacionales están todos cerrados. Quienes tengan pensado viajar desde España o desde el resto de Europa tendrán suerte porqué está previsto que los aeropuertos puedan reabrir en las próximas horas.
Nueva York está especialmente bonita bajo la nieve pero el día se hace muy incómodo, la ciudad se ha despertado cubierta de una capa de nieve que hacía prácticamente impracticable moverse con el coche.
El nordeste de Estados Unidos empezó a sacudirse hoy la nieve de una tormenta que forzó la cancelación de cientos de vuelos, cerró aeropuertos desde Washington a Nueva York y obligó al cierre anticipado de oficinas gubernamentales el miércoles. Los aeropuertos Dulles International y Reagan National, de Washington, reanudaron gradualmente esta mañana sus operaciones, y se espera la reapertura de todas las pistas del Aeropuerto Internacional John F. Kennedy, de Nueva York, antes del mediodía.
El Servicio Meteorológico Nacional había extendido sus avisos de tormenta desde el sur de las montañas Apalaches hasta las costas de Massachusetts. En toda la región hay esta mañana demoras en la apertura de escuelas, universidades y oficinas del gobierno. En el Parque Central de Nueva York anoche la acumulación de nieve alcanzó el nivel, sin precedentes, de 31,5 centímetros, superando la marca registrada en 1871, según los meteorólogos.
