Este viernes cierra el plazo de votación para elegir al sucesor de Boris Johnson, cuyo resultado se conocerá el lunes

Día decisivo para Reino Unido de cara a la conclusión de su mayor crisis política desde el Brexit. Este viernes, se cierra la votación entre los militantes del Partido Conservador que elegirán entre la ministra de Exteriores, Liz Truss, o el exministro de Finanzas, Rishi Sunak, como el próximo líder británico. Quien venza, se convertirá en el tercer 'premier' que llegue a Downing Street sin haber ganado previamente las elecciones, tras Theresa May y Boris Johnson.

Liz Truss parte como la gran favorita, y ha radicalizado su discurso en las últimas semanas, llegando a decir que "está dispuesta a pulsar el botón nuclear" si llega a ser elegida, o cuestionando la lealtad del presidente de Francia, Emmanuel Macron, hacia su país, llegando a decir que "no sabe si es amigo o enemigo". El actual primer ministro, Boris Johnson, tuvo que intermediar en medio de este asunto para que la situación no fuera a más.

Por otro lado, Rishi Sunak trata de convencer a los votantes indecisos y lograr que sean ellos quienes le den la victoria. Sunak ha ganado con solvencia todos los procesos eliminatorios en las primarias de los 'tories' y corre riesgo de ser derrotado en la elección final. Teme que los leales a Johnson le den la espalda y se unan para dar la victoria a Liz Truss, al ser él el primero de todos los ministros que dimitieron para forzar la caída del 'premier'.

Isabel II rompe una histórica tradición

La votación concluye este viernes, pero los resultados no se darán a conocer públicamente hasta el próximo lunes, para que puedan recontarse con total efectividad y que no haya ningún error en el conteo. Será el lunes 5 de septiembre cuando se haga oficial el nombre del ganador que liderará Reino Unido al menos hasta 2024, y al día siguiente, martes 6 de septiembre, la persona ganadora jurará oficialmente el cargo para suceder a Boris Johnson.

Para la jura, hay un cambio histórico por primera vez en 70 años. La reina Isabel II recibirá al vencedor en Escocia, y no en Londres, como suele ser costumbre. Se achaca este cambio a la delicada salud de la monarca británica, quien, a sus 96 años, padece algunos problemas de movilidad que le impiden moverse todo lo que ella querría. El gesto de la jura en Escocia es también un guiño al intento por evitar un nuevo referéndum de independencia, tal y como pretende la primera ministra Nicola Sturgeon, en octubre de 2023.

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