Evo Morales teme que EEUU le implique en alguna trama de narcotráfico

El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha asegurado en Naciones Unidas que tiene miedo de estar en Estados Unidos y acusó a Washington de querer implicarle en alguna trama de narcotráfico para desprestigiar a su Gobierno. "Estados Unidos nos quiere implicar. Le tengo miedo a su Gobierno, porque son operadores políticos y manejan el narcotráfico con intereses geopolíticos", aseguró Morales en una rueda de prensa que ofreció en la sede central de la ONU.

Morales aseguró que "incluso antiguos agentes" han confirmado a las autoridades de su país que el Departamento Estadounidense Antidroga (DEA) utiliza el narcotráfico "como excusa". "Desde el 11-S la situación es peor. A aquellos que sufren problemas sociales y presentan reivindicaciones sociales, se les llama terroristas. A mí me han llamado el Bin Laden andino de Bolivia y últimamente ya no nos llaman terroristas, sino narcotraficantes", dijo el presidente boliviano.

Aunque Morales se mostró dispuesto a mejorar las relaciones con Washington, advirtió que no aceptará "relaciones diplomáticas que lleven a conspiraciones" y recordó que en 2008 expulsó al embajador estadounidense de su país "porque estaba liderando una conspiración política y un golpe de Estado". "Allá donde haya un embajador estadounidense existe la posibilidad de que se produzca un golpe de Estado"dijo el político andino y añadió con sarcasmo que "el único lugar en el mundo donde no es posible, es en Estados Unidos, porque aquí no hay embajadores estadounidenses".

El presidente boliviano aseguró que el "marcador" entre Latinoamérica y Estados Unidos en materia de golpes de Estado se encuentra ahora mismo 3-1, después de que se evitaran en los últimos años golpes orquestados a su juicio por Washington en Venezuela, Bolivia y Ecuador, aunque no se pudo evitar el de Honduras. "Antes perdíamos un partido tras otro. Allá donde había un Gobierno que no gustaba a Estados Unidos, había un golpe de Estado, pero ahora nos estamos liberando", indicó Morales que se calificó de "socialista, comunista, marxista y leninista".

Morales, que está en la ONU para conmemorar en la Asamblea General el primer aniversario del reconocimiento del agua como derecho humano, insistió ante la prensa que "el agua es tan importante como cualquier otro derecho". "Tenemos la enorme responsabilidad de implementar políticas internacionales en los distintos Estados para que el agua sea de verdad un servicio público y no un negocio privado", indicó.