Michael Cohen, exabogado personal del presidente estadounidense, Donald Trump, ha asegurado que aceptó colaborar con la justicia por estar "cansado de las mentiras" de su exjefe, y subrayó que este conocía que el pago para silenciar a dos mujeres con las que supuestamente tuvo relación "estaba mal".
"Estoy cansado de las mentiras. Estoy cansado de ser leal al presidente Trump. Di lealtad a alguien que, en verdad, no merece lealtad", afirmó Cohen en una entrevista en la cadena ABC. Las palabras de Cohen son las primeras después de que el miércoles fuese condenado a tres años de cárcel por una serie de cargos que incluyen asuntos vinculados a la investigación sobre la trama rusa, como mentir al Congreso sobre el proyecto del ahora mandatario de ubicar en Moscú una Torre Trump.
Se declaró culpable tanto en ese caso dirigido por el fiscal especial que investiga la trama rusa, Robert Mueller, como en otro encabezado por fiscales de Nueva York, que le acusaban de evasión de impuestos y violaciones de la ley de financiación de campañas electorales por el pago a dos mujeres, a las que Trump quería silenciar por haber cometido adulterio con ellas.
"Por supuesto" que el presidente sabía que estos pagos "estaban mal", indicó quien fuera uno de sus colaboradores más estrechos. Este jueves, Trump marcó distancias respecto a Cohen al asegurar que "nunca" ordenó a su exabogado "violar la ley" y que "simplemente aceptó esos cargos para avergonzar al presidente" y obtener "una sentencia de prisión muy reducida".
El exletrado descartó que alguien pueda creer eso: "En primer lugar, nada en la Organización Trump se hacía si no pasaba por Trump. Él me instó a hacer esos pagos, me instó a involucrarme en estos asuntos", agregó. En concreto, Cohen indicó que el actual presidente estaba entonces "muy preocupado por cómo podría afectar las elecciones" presidenciales de 2016, ya que se conocieron semanas antes de la votación.
Por su parte, uno de los portavoces de la Casa Blanca, Hogan Gidley, ha acusado a la prensa "dar credibilidad a un criminal convicto", en referencia al testimonio de Cohen. Gidley consideró que los medios están dando por cierto el testimonio de una persona condenada que "ha admitido ser un mentiroso".
"Él ha admitido mentir. Todos lo sabéis y que ahora haya dicho que va a dejar de hacerlo es un poco tonto", respondió Gidley al ser preguntado por las supuestas pruebas documentales que acreditarían los pagos de Trump a las dos mujeres para comprar su silencio.