Los restos de los primeros cuerpos rescatados tras el accidente del Airbus A320 que cubría la ruta Barcelona-Düsseldorf y que el día 24 se estrelló en los Alpes ya están siendo identificados por los forenses, antes de su traslado a la capilla ardiente, han informado fuentes de la Gendarmería.
Los primeros cadáveres fueron evacuados en helicópteros a última hora de ayer, antes de que se interrumpiesen las labores de rescate, y han sido recibidos en un puesto avanzado médico en Seyne-les-Alpes. Allí son tratados con material traído del servicio de identificación criminal de la Gendarmería, cuya sede está en Rosny-sous-Bois, al este de París, han explicado las mismas fuentes.
Posteriormente, los cuerpos se envían a la capilla ardiente instalada en el pueblo para que las familias, que llegarán a primeras horas de la tarde, puedan honrar a sus allegados.
Familiares de los fallecidos en el avión han salido esta mañana hacia Francia desde el hotel Don Jaime de Castelldefels, donde permanecían atendidos por psicólogos, para tomar un avión de Lufthansa.
Un primer grupo, formado por 14 familiares de las víctimas y 11 miembros del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) y de Cruz Roja, partió anoche por carretera alrededor de las 21:00 horas hacia Marsella.
A este primer grupo se le ha unido esta mañana otro, integrado por un centenar de personas, que ha abandonado el hotel a las 08:15 horas y que se desplazará en un avión fletado por Lufthansa que tiene previsto despegar del aeropuerto barcelonés de El Prat a las 09:35 horas, 50 minutos más tarde de lo previsto, también con destino a Marsella.
En Marsella se unirán ambos grupos, que desde esta ciudad del sudeste de Francia emprenderán viaje por carretera hasta Seyne-les-Alpes, la zona en la que se produjo la catástrofe aérea que causó 150 muertos, 51 de ellos españoles.