El Rey Felipe VI y el jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, celebraron en Veracruz el tradicional desayuno de trabajo de los mandatarios españoles con los presidentes de los países de Centroamérica, una reunión que sirvió para tender puentes con la vista puesta en la UE.
El proceso de integración de estas naciones en el marco del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), el acuerdo de asociación con la Unión Europea y también la cooperación española, que ha cumplido 25 años en esta zona del mundo, ocuparon buena parte del encuentro, que se prolongó durante hora y media. Asistieron los presidentes de cinco países: Honduras, Juan Orlando Hernández; Costa Rica, Luis Guillermo Solís; Panamá, Juan Carlos Varela; Guatemala, Otto Pérez Molina y República Dominicana, Danilo Medina.
Por parte de El Salvador estuvo el canciller Hugo Martínez y en nombre de Nicaragua, el vicepresidente del país, Moisés Omar Halleslevens. Acabado el desayuno, el Rey Felipe mantuvo un encuentro bilateral con el presidente de Paraguay, Horacio Cartes, que complementa los dos celebrados ayer con el presidente de Perú, Ollanta Humala, y Uruguay, José Mujica.
El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, también presente en el desayuno, explicó a su término que se había analizado en qué medida puede España prestar ayuda a los países centroamericanos, no solamente en su vertiente nacional, sino también teniendo en cuenta su pertenencia a la UE. Fuentes gubernamentales destacaron que España se ofreció a estos países como "puente" de acceso a la Unión Europea. Desde la Casa Real española se apuntó que el encuentro sirvió para abordar la aplicación del Acuerdo de Asociación entre Centroamérica y la Unión Europea y también el proceso de integración regional dentro del SICA.
España apoya esta integración y además ofrece su experiencia en su propio proceso de incorporación a la Unión Europea. En cuanto a la cooperación, se estudió desde un enfoque regional, añadieron estas fuentes, haciendo hincapié en el 25 aniversario de la puesta en marcha de los planes de cooperación española con Centroamérica.
La colaboración y el apoyo a los proceso de gobernanza democrática y, en el ámbito económico, la mejora de competitividad en los países del área también estuvieron presentes en la cita, donde tomaron la palabra todos los mandatarios.
Los presidentes centroamericanos explicaron sus avances en materias como la lucha contra el narcotráfico, el contrabando y el blanqueo de capitales, y España ofreció la experiencia y capacidad de las empresas españolas en áreas de especial interés para la región, como las infraestructuras y la seguridad. La educación, uno de los tres asuntos que han centrado esta cumbre junto a la cultura y la innovación, también fue tratada, y los presidentes explicaron los avances conseguidos en esta materia, señalaron las fuentes del Gobierno español.
Tras el desayuno, el Rey y Rajoy se incorporaron al llamado "retiro" de los mandatarios, un encuentro a puerta cerrada sin agenda, y después comenzó la última sesión de la cumbre, en la que intervino el presidente del Gobierno español con una exposición sobre innovación, sin previsión inicial de que Felipe VI tomara la palabra.