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Elecciones Parlamentarias Venezuela

Con el fin del chavismo termina una forma muy particular de gobernar

Con esta severa derrota en las urnas, el chavismo pierde buena parte de la fuerza y la legitimidad que le quedaban. Primero con Chávez y después con Maduro, el régimen venezolano se ha caracterizado por un alto nivel de populismo, y por unos dirigentes que, a menudo, han mostrado una actitud desafiante, con insólitas declaraciones que han quedado grabadas en la escena internacional

 

El chavismo pierde fuerza y legitimidad al ser derrotado en las urnas, terminando así con una forma muy particular de gobernar. Hugo Chávez puso su estilo al servicio de su revolución bolivariana.

No dudó en dirigir al país en directo. Los medios de comunicación sirvieron para ser altavoz de sus mensajes populistas. Y combatió a la oposición de la misma forma, con insultos. En la memoria de todos queda aquella famosa frase de "¿porqué no te callas?".

Su sucesor Nicolás Maduro intentó, sin éxito, mantener el carisma de su antecesor y no dudó en usar el espíritu de Chávez. Famoso es el momento cuando dijo que Chávez le hablaba reencarnado en un pajarito.

De conductor de autobuses, Maduro,  pasó a tomar las riendas del país, fiel a su comandante en la forma de hacer política y de relacionarse internacionalmente; sobre todo con España.

Ahora los venezolanos lo han colocado en la puerta de salida.

 

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