El gobierno griego introduce en el Parlamento la ley contra la crisis humanitaria

Este primer proyecto legal del nuevo Gobierno ofrece a los más pobres electricidad gratuita hasta un máximo de 300 kilovatios hora al mes y prevé ayudas al pago del alquiler para 30.000 viviendas en arriendo durante un año, que podrán ser prorrogadas en 2016.

Las personas que se acojan al programa, que no deben recibir ayudas de otras iniciativas ni europeas ni regionales, tendrán derecho a una subvención de 70 euros al mes, con un máximo de 220 euros para las familias numerosas.

La ley prevé además ofrecer bonos de alimentos a 300.000 personas, que recibirán cupones con los que podrán comprar comida. También prorroga la cobertura sanitaria hasta febrero de 2016 para todo aquel que no tenga deudas y se encuentre en situación de desempleo. Estas primeras medidas costarán 200 millones de euros, según explicó el ministro de Finanzas griego, Yanis Varufakis, y se pretende financiar mediante fondos europeos y la mejora de la recaudación fiscal.

El partido del ex primer ministro conservador Andonis Samarás reaccionó a la propuesta asegurando que algunas de estas medidas, como los suministros para las familias más pobres, ya estaban previstas por su Gobierno e incluidas en el último presupuesto confeccionado junto a los socialdemócratas del Pasok. Samarás insistió en que los comedores sociales, la asistencia sanitaria en caso de urgencia y la protección a la primera vivienda ya habían estado funcionando bajo su mandato.

Respecto al proyecto piloto de renta mínima garantizada, según el cual parados de larga duración de trece ciudades recibían una ayuda de entre 200 y 400 euros al mes, y que también se inició en la última legislatura, la ministra adjunta de Solidaridad Social, Theanó Fotíu, aseguró que "continúa y se evaluará cuando expire".

El partido neonazi Amanecer Dorado, en un comunicado, anunció que votará a favor de las medidas propuestas recordando que es la única fuerza "que siempre ha utilizado su financiación pública para combatir la crisis humanitaria con comedores sociales y organizaciones benéficas".

Según datos de la Autoridad Helena de Estadística, a mediados de 2014 un 23,1% de la población griega se encontraba por debajo del umbral de la pobreza y había un 28,8 % de pobreza infantil. Así, unos dos millones y medio de personas tenían ingresos anuales inferiores a 5.023 euros o se trataba de familias que vivían con menos de 10.547 euros al año.