El autoproclamado "presidente encargado" de Venezuela, Juan Guaidó, ha llegado este miércoles a Bruselas para "afianzar la presión de Europa" sobre el Gobierno de Nicolás Maduro, en el marco de una gira internacional con la que recalará en España el fin de semana.
"Ya en Bruselas. Hoy, junto al presidente, tendremos jornada de reuniones para afianzar la presión de Europa", ha informado el opositor venezolano Julio Borges, responsable de la política exterior del gabinete de Guaidó.
La jornada de Guaidó en la UE ha comenzado con una reunión con el vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, al que seguirá otra con el Alto Representante para Política Exterior, Josep Borrell. Borges ha indicado que culminarán su agenda en Bruselas con una reunión con los embajadores del Grupo de Lima, formado por los países americanos más críticos con el Gobierno de Maduro.
Guaidó en España
Pedro Sánchez no recibirá a Juan Guaidó, por lo que ambos mandatarios no se reunirán. El Gobierno español solamente ofrece al venezolano un encuentro con Exteriores.
Esta postura llega después de que Sánchez fuera uno de los primeros mandatarios en reconocer a Guaidó como "presidente encargado de Venezuela" y de difundir hace un año en Davos una imagen de una conversación telefónica entre ambos. Por aquel entonces, Sánchez no gobernaba con Unidas Podemos.
Este miércoles, el portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados, Iván Espinosa de los Monteros, atribuyó a la “deriva del PSOE hacia el comunismo” que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, no reciba a Guaidó.
En rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, Espinosa de los Monteros consideró que éste es un síntoma “de cómo el PSOE cada vez se aleja más de la socialdemocracia europea” y se va aproximando “más al comunismo y no sólo por la alianza con Podemos”.
“Estar apoyando al señor Maduro y no apoyar al señor Guaidó, quien no es precisamente un representante de la derecha pero sí el más legítimo representante político en Venezuela, es sintomático de que este Gobierno toma una deriva cada vez más radical, cada vez más influida y determinada por el comunismo”, denunció. Por último, Espinosa de los Monteros consideró que esta situación es “muy preocupante” y afecta al propio liderazgo de España en Latinoamérica.