[[RELATEDHollande: "No hay duda de que se trata de un atentado terrorista"[[/RELATED El presidente francés, François Hollande, ha celebrado una reunión de crisis con los miembros de su Gobierno directamente implicados en la gestión del atentado mortal contra Charlie Hebdo, antes de recibir a su predecesor, el conservador Nicolas Sarkozy. El presidente francés, François Hollande, y su predecesor, el conservador Nicolas Sarkozy, reiteraron mensajes en favor de la unidad de los franceses tras el atentado mortal contra el semanario satírico Charlie Hebdo. Hollande, en un discurso de homenaje a una personalidad de la resistencia francesa, señaló que ante un ataque como el de Charlie Hebdo "nuestro país, nuestra gran Francia, sabe unirse para defender su ideal, el de la República, el de la paz, frente a los que la pretenden atacar matando periodistas y policías". Recordó que se vive una jornada de duelo nacional porque "Francia ha sido atacada en su corazón, en su capital, en un lugar donde soplaba un viento de libertad, y por tanto de resistencia". Sarkozy, que fue recibido esta mañana por Hollande en el Palacio del Elíseo, señaló a los medios de comunicación a la salida que el objeto de la reunión era "mostrar el clima de unidad nacional que es el deber de todos frente al ataque de fanáticos determinados contra la civilización, contra la República". "No es siquiera una cuestión de democracia o de la República, sino de civilización", comentó en tono grave el presidente de la Unión por un Movimiento Popular (UMP), principal partido de oposición. El anterior jefe del Estado mostró la "disponibilidad" de su formación para colaborar con el presidente, al que solicitó "mejorar nuestros dispositivos" para "proteger a los franceses". "Como yo, está convencido en que hay que aumentar el nivel de vigilancia", indicó antes de añadir que puesto que "la amenaza evoluciona, nuestro dispositivo debe evolucionar también". Dispositivo para detener a los responsablesAl término de la reunión de crisis del Ejecutivo, que duró alrededor de tres cuartos de hora, el primer ministro, Manuel Valls, explicó en una declaración que habían examinado el dispositivo "para detener a los individuos que cometieron" el ataque terrorista. Una alusión, en particular a la búsqueda de los principales sospechosos, los hermanos Chérif y Said Kouachi, cuyas fotos fueron divulgadas por la policía la pasada noche junto a la de un tercero, Mourad Hamyd, que se entregó en una comisaría de la ciudad de Charleville Mézières (noreste de Francia) al saber que iban tras él. Valls había señalado a primera hora de la mañana que durante la noche se habían realizado "varias" detenciones vinculadas con la investigación, que algunas fuentes cifraron entonces en siete, relacionadas con el entorno de los hermanos Kouachi.