Un hombre sobrevive de milagro después de que un comerciante se negara a ayudarle cuando sufría una crisis respiratoria

Un hombre de Venecia (Italia) casi muere asfixiado en la carretera al no recibir la ayuda del dueño de un negocio cuando le estaba dando una crisis respiratoria.

"No quiero dinero. Lo hago por una cuestión de humanidad, iba a morir y no hizo nada", dijo el afectado.

El joven, de 27 años, se dirigía a la ciudad después de visitar a un cliente en la cárcel cuando comenzó a sentir que le faltaba el aliento.

Ante esta angustiante situación, cogió su móvil y llamó al número de emergencias. Sin embargo, no podía articular palabra, por lo que el operador inmediatamente comprendió la gravedad de la situación.

Los encargados de atender las llamadas de emergencia le preguntaron a dónde debía ir la ambulancia, pero el joven no podía contestar, de su boca sólo salían jadeos, según informa Leggo.

Para poder ser ayudado, se le ocurrió meterse en una tienda para pasar el teléfono al dueño y que pudiese hablar con el operador de la línea de emergencias, pero la caridad y ayuda que esperaba nunca llegó, pues el comerciante, lejos de coger el móvil, le echó de malas formas del negocio.

"Me decía que tenía que salir de allí", informó el afectado.

Una vez fuera del local y sin haber recibido ningún tipo de ayuda, se detuvo en el borde de la carretera y cayó allí mismo quedando inconsciente, hasta que finalmente el conductor de un coche que pasaba por la zona se percató de lo ocurrido y decidió socorrerle.