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SIN COMIDA NI BEBIDA

Un hombre sobrevive cuatro días encerrado en el ascensor de su hotel en Austria

El hombre estaba realizando unas comprobaciones en el hotel, situado en el resort de esquí austriaco de Bad Gastein, cuando el ascensor se rompió mientras bajaba. El hombre, de origen sueco, no llevaba el móvil consigo y aunque intentó salir por diversos medios, no lo logró, ya que el hotel estaba cerrado y nadie echó de menos su presencia.

Un hotelero ha sobrevivido cuatro días encerrado, incomunicado sin comida ni bebida en el ascensor de su hotel en la localidad alpina de Bad Gastein, según el diario 'The Telegraph' que asegura que el hombre fue rescatado por los bomberos "en buen estado físico".

El dueño del hotel llamado Thomas Fleetwood estaba realizando unas comprobaciones en el Hotel Eden, situado en el resort de esquí austriaco de Bad Gastein, cerca de Salzburgo, cuando el ascensor se rompió mientras bajaba desde el quinto piso.

Hotel donde se quedó encerrado

El hombre, de origen sueco, no llevaba teléfono móvil ya que se lo había dejado olvidado en su oficina, y aunque intentó salir por diversos medios no lo logró ya que el hotel se encontraba cerrado y nadie echó de menos su presencia.

"El ascensor no se ha roto nunca y no me esperaba que esto fuera a ocurrir. Rompí un panel de cristal pequeño en la puerta del ascensor y eso me dio un poco de aire fresco para respirar. Traté de escapar por el techo del ascensor pero tampoco pude", explicó Fleetwood al diario 'Australian Times'.

Finalmente el hotelero fue encontrado por un amigo que le traía pan y que advirtió la cantidad de correo que había en el exterior del hotel sin recoger y entró en el edificio con unas llaves que tenía tras oír sus gritos al tiempo que alertaba a los bomberos.

El portavoz policial Erwin Resch afirmó que el hombre estaba en buena forma ya que aunque no tenía nada para comer y beber, "no cayó en pánico" y logró sobrevivir gracias al entrenamiento de supervivencia que hizo durante el servicio militar en Suecia.

"Hablaba conmigo mismo y hacía planes para el futuro para no ponerme nervioso mientras estaba allí encerrado", explicó el valiente hotelero.

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