Hungría prohíbe los eventos del Orgullo LGBTQ+ e impondrá multas a quien asista

Por 136 votos a favor y 27 en contra el partido de Orbán y su socio minoritario de coalición, los Demócratas Cristianos, han aprobado la ley que prohíbe al colectivo LGBTQ+ celebrar eventos el día del Orgullo. Una celebración que atrae a miles de personas a Budapest. Pero además la ley sanciona. Asistir a un evento prohibido conlleva multas de hasta 500 euros. Y para identificar a los asistentes, la policía va a utilizar el reconocimiento facial.

El Parlamento ha modificado la ley sobre reuniones para tipificar como delito celebrar o asistir a eventos que violen la polémica legislación de "protección infantil" del país, que prohíbe la "representación o promoción" de la homosexualidad ante cualquier persona menor de 18 años.

En el Parlamento se han vivido momentos de tensión. Mientras se votaba los diputados de la oposición del partido Momentum encendieron bombas de humo en la Cámara. Los organizadores del Orgullo de Budapest denuncian que el objetivo de la ley es "convertir en chivo expiatorio" a la comunidad LGBTQ+ para silenciar las voces críticas con el gobierno de Orbán.

"Un ataque frontal contra la comunidad LGBTQ+"

"Esto no es protección infantil, es fascismo", declara Máté Hegedűs, responsable de prensa del evento. "El Orgullo es un movimiento que no se puede prohibir". El gobierno de Orbán ha aprobado otras leyes que grupos de derechos humanos califican de represivas contra las minorías sexuales.

Un ataque que el gobierno de Hungría contrarresta. Se presenta como un defensor de los valores de las familias tradicionales y de la comunidad cristiana frente a lo que llama "locura de género". Argumenta que sus políticas están diseñadas para proteger a los niños de la "propaganda sexual".

Amnistía Internacional asegura que la ley es "un ataque frontal" contra la comunidad LGBTQ+ . En vísperas del 30 aniversario del Orgullo de Budapest en junio, esta prohibición retrocede tres décadas. Es un "atentado contra los derechos duramente conquistados de las personas LGBTI en Hungría", afirma Dávid Vig, director de Amnistía Internacional Hungría.

Tamás Dombos, coordinador de proyectos de la Sociedad Hatter, grupo húngaro de derechos LGBTQ+ describe el ataque de Orbán a las minorías como una táctica para distraer a los votantes. "Es una estrategia de los gobiernos autoritarios. No hablar de los problemas reales que afectan a la gente: la inflación, la economía, las pésimas condiciones de la educación y la sanidad". "Orbán ha estado aquí con nosotros durante 15 años mintiendo a la gente, dejando que el país se pudra y luego presentando estas campañas de odio". asegura Dombos.

Por su parte, el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, aseguró este miércoles que "los derechos de la comunidad LGTBI y la libertad de manifestación son derechos fundamentales en la UE".

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