Los peritos forenses argentinos confirmaron que uno de los restos óseos encontrados corresponde a uno de los 43 estudiantes desaparecidos en el municipio mexicano de Iguala tras los hechos de violencia del 26 de septiembre pasado, informó la Escuela Normal de Ayotzinapa.
La institución confirmó en su página de Facebook que los restos corresponden a Alexander Mora Venancio, mientras que asesores legales de los familiares y de los estudiantes indicaron que la información completa se dará durante un mitin en la capital mexicana, al término de una protesta para exigir justicia por los desaparecidos.
"Hoy 6 de diciembre le confirmaron los peritos Argentinos a mi padre que uno de los fragmentos de mis huesos encontrados me corresponden", señala el mensaje divulgado por la Escuela Normal y que pone en primera persona como si fueran palabras del propio Mora Venancio.
Este mensaje, que va acompañado de la fotografía del estudiante, añade: "Me siento orgulloso de ustedes que han levantado mi voz, el coraje y mi espíritu libertario". También pide no dejar a su padre sólo con su pesar, ya que "para él significo prácticamente todo, la esperanza, el orgullo, su esfuerzo, su trabajo y su dignidad".
Asimismo, invita a todos lo quienes se han solidarizado con ellos a redoblar la lucha para que "mi muerte no sea en vano. Toma la mejor decisión pero no me olvides. Rectifica si es posible pero no perdones. Este es mi mensaje".
La noche del 26 de septiembre pasado un grupo de policías locales dispararon contra decenas de alumnos de esa institución educativa por órdenes del entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca, ataques que dejaron seis personas muertas y otras 25 heridas.
Además, los policías capturaron a 43 jóvenes y los entregaron al cártel Guerreros Unidos, que se encargó de asesinarlos e incinerarlos para no dejar rastro.
La Fiscalía mexicana informó que los estudiantes habían sido conducidos a un depósito de basura en el municipio de Cocula, vecino de Iguala en Guerrero, y ahí habían sido asesinados y sus cuerpos incinerados durante varias horas.
Esta versión fue rechazada por los familiares quienes se indignaron y exigieron pruebas periciales contundentes y precisas de expertos independientes, y manifestaron su decisión de continuar la búsqueda.
Miles de personas marcharon por las principales avenidas de Ciudad de México para exigir justicia para los 43 desaparecidos.