Irán suspendió este domingo las exportaciones de petróleo a Francia y el Reino Unido en respuesta a las últimas sanciones europeas, y anunció que la próxima cita con el Grupo 5+1, para negociar su programa nuclear, será en Estambul.
El portavoz del Ministerio de Petróleo iraní, Ali Reza Nikzad, afirmó que "la exportación de crudo para las empresas inglesas y francesas se ha suspendido", en declaraciones divulgadas por la agencia de noticias petrolera de Irán, Shana.
Nikzad recordó que, previamente, el ministro de Petróleo, Rostam Qasemi, había anunciado la posibilidad de suspender la exportación de crudo a algunos países europeos tras las nuevas sanciones financieras y petroleras impuestas a Irán por la Unión Europea.
El pasado 23 de enero, los Veintisiete decidieron reforzar las sanciones financieras y prohibir la compra de petróleo a Irán a partir del próximo 1 de julio si no suspende su programa nuclear, que muchos países sospechan que tiene fines armamentistas, mientras Teherán lo niega y afirma que es exclusivamente civil y pacífico.
Irán, según Nikzad, no tiene problema para la exportación de su petróleo, al destacar que su ministerio "ha considerado clientes alternativos para la venta de crudo en lugar de a las empresas del Reino Unido y Francia", con cuyos gobernantes Teherán tiene graves diferencias.
El viernes, el gobierno de Teherán rechazó las "repetidas e infundadas" acusaciones del presidente francés, Nicolas Sarkozy, de que lleva a cabo actividades nucleares no pacíficas, que considera que pretenden justificar sanciones y frenar el progreso iraní.
También este domingo, el ministro británico de Exteriores, William Hague, uno de los políticos europeos más beligerantes con Teherán, acusó a Irán de amenazar la paz mundial por su creciente voluntad de llevar a cabo "actividades ilegales y potencialmente terroristas".
Los países más afectados por un recorte del suministro iraní a la Unión Europea antes del 1 de julio serían Grecia, España e Italia, que reciben de Irán entre un 13 y 14 por ciento del crudo que consumen, mientras Francia, Alemania y Holanda importan cantidades menores y el Reino Unido muy poco.
Ante esta coacción, la Unión Europea ha respondido con la búsqueda de otros proveedores, Arabia Saudí y Nigeria, entre otros.
Los indicios sobre el desarrollo de tecnología nuclear con fines bélicos han puesto a Irán en el punto de mira. Un diplomático ha informado de la instalación de miles de centrifugadoras de última generación en una planta subterránea fortificada bajo la ciudad de Qom. El anuncio que se produce la víspera de una nueva visita de los inspectores internacionales.
Paralelamente, en los últimos días se han multiplicado las muestras de fuerza. El domingo, dos barcos de guerra atracaban en un puerto sirio, en pleno mar Mediterráneo y hoy, la guardia revolucionaria ha iniciado unas maniobras mostrando su capacidad de respuesta ante una amenaza extranjera