El Ejército de Israel ha llevado a cabo un ataque a gran escala contra objetivos iraníes en Siria y el sistema de defensa antiaéreo sirios, tras el derribo de un caza israelí esta mañana. "Doce objetivos, entre ellos tres baterías de defensa aérea y cuatro objetivos iraníes que forman parte del establecimiento militar de Irán en Siria, fueron atacados", informó el Ejército en un comunicado.
Durante el ataque las baterías antimisiles dispararon contra la aviación israelí lo que activó las alarmas antiaéreas en los ocupados Altos del Golán, al norte de Israel, por segunda vez este sábado. A primera hora, un avión F-16 del Ejército de Israel fue derribado por Siria, cuando los cazas atacaron objetivos iraníes en el país vecino en respuesta a la incursión de un dron iraní en espacio aéreo israelí.
El avión, que fue alcanzado, cayó en territorio israelí y los pilotos fueron evacuados a un centro sanitario, uno de ellos de gravedad. "Un piloto del Ejército resultó gravemente herido como resultado de una evacuación de emergencia de un avión. El piloto fue trasladado al hospital para recibir tratamiento médico. El incidente está siendo revisado. La familia ha sido notificada", informó un portavoz militar poco después del incidente.
"El Ejército ve los ataques iraníes y la respuesta siria como una grave e irregular violación de la soberanía israelí", advirtió. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha reiterado su preocupación por el aumento de las fuerzas pro iraníes en Siria que combaten junto el presidente sirio, Bachar Al Assad, y asegura que no permitirá que se posicionen cerca de la línea divisoria.
Crisis Group alertó en un informe de esta semana del incremento de la tensión en el norte y pidió a Rusia mediar para que mantenga los actuales acuerdos de contención por los que las fuerzas iraníes se mantiene lejos de territorio controlado por Israel. Tras los ataques, Israel dijo que "está preparado para todos los escenarios" y que "continuará atacando cuando sea necesario".
Derriban un helicóptero turco en Siria
El helicóptero turco caído en la operación militar de Afrín fue derribado por las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza capitaneada por las milicias kurdas Unidades de Protección Popular (YPG), según el Partido de la Unión Democrática (PYD), la principal fuerza política kurdo siria. El PYD, en un breve comunicado, aseguró que "las Fuerzas de Siria Democrática derribaron un helicóptero del tipo Sikorski del ejército de ocupación turco cuando bombardeaba viviendas civiles en una población de la comarca de Rayu".
El partido, que no da detalles sobre el destino corrido por los pilotos, asegura que el derribo tuvo lugar en la aldea de Qada. El primer ministro turco, Binali Yildrím aseguró que dos soldados turcos murieron al caer el helicóptero de las Fuerzas Armadas de su país en dicho cantón kurdo de Siria. Sin embargo, en declaraciones a la cadena NTV, apuntó que no se disponía de ninguna prueba de que el aparato hubiera "caído por intervención externa".
Según Yildirim se trataba de un helicóptero Atak, un modelo desarrollado y fabricado en Turquía, que sobrevolaba la región de Afrin en un vuelo de patrulla junto a otro helicóptero del mismo tipo. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, había afirmado anteriormente que un helicóptero había sido derribado en la región. "Lo pagarán muy caro", advirtió el presidente sin aportar más detalles sobre el suceso.
