Janez Jansa, un nuevo Donald Trump en el corazón de Europa

La chispa que ha hecho prender el fuego ha sido una misión de observación que el Parlamento Europeo ha organizado a Eslovenia. Los 8 eurodiputados querían conversar con Gobierno y social civil para evaluar si realmente está en riesgo en este país la libertad de prensa y el Estado de derecho, como vienen denunciando muchas organizaciones sociales.

El primer ministro Janez Jansa se ha negado a participar en esas conversaciones argumentando que "Eslovenia no es una colonia" y respondiendo duramente: "quién se creen que son… y por qué nunca han hecho lo mismo con un presidente de Francia o un Canciller de Alemania", ha llegado a publicar en su cuenta de Twitter. Para colmo, Jansa ha tachado en otro tuit a estos diputados de "marionetas de George Soros" (magnate estadounidense y judío, convertido en la auténtica bestia negra del húngaro Viktor Orban).

Estos duros ataques contra miembros legítimos de la Cámara comunitaria han provocado la reacción inmediata de primeros espadas de la política europea como el presidente del Parlamento, David Sassoli, o el primer ministro holandés, Mark Rutte, que incluso ha expresado sus quejas ante el embajador esloveno en La Haya.

Pero Janez Jansa no se ha amilanado y ha demostrado que tiene más material inflamable para seguir incendiando Europa. De nuevo, en su red social favorita (emulando a su admirado Trump) le ha respondido a Rutte diciendo que "no pierda su tiempo con embajadores y que mejor se preocupe de que no haya periodistas que mueran en las calles de Holanda" (ya que apunta que hace poco un periodista fue asesinado en Ámsterdam).

El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel ha tenido que llamar a las dos partes para pedir respeto mutuo.

En Bruselas crece la preocupación ante este personaje que, desde hace meses, viene mostrando su deriva autoritaria, pero que ahora ha ido un paso más allá, entrando al choque personal contra otro primer ministro de la Unión. Además, lo hace desde su posición institucional, ya que se da la circunstancia de que él ahora mismo es el presidente de turno de la UE. Para tratar de calmar las aguas, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha tenido que llamar por teléfono a las dos partes para pedir respeto mutuo y, a su vez, dejarle claro a Jansa que la eurocámara debe poder trabajar sin presiones en todos los países de la UE, sin excepción.

Veremos si se opta por parar los pies al esloveno o mirar hacia otro lado y rezar

La próxima semana, los días 21 y 22 de octubre, hay cumbre de líderes europeos en Bruselas. Se verán las caras en la misma sala Jansa, Rutte, Sassoli y Michel… Veremos si se opta por parar los pies al esloveno descarriado antes de que sea demasiado tarde o si, como hemos visto otras veces, se opta por mirar hacia otro lado y rezar para que las siguientes elecciones en Eslovenia se lleven el problema.

Guillermo Pascual, corresponsal en Bruselas de Antena 3 Noticias.

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