El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación en funciones, Josep Borrell, será el próximo alto representante de la UE para la Política Exterior y, por lo tanto, también vicepresidente de la Comisión Europea que presidirá la conservadora alemana Úrsula von der Leyen, en virtud del acuerdo alcanzado por los jefes de Estado y Gobierno de los Veintiocho.
Con su nombramiento, España vuelve a tener uno de los considerados 'top jobs', puestos de primera fila que son negociados por el Consejo Europeo, por primera vez en 10 años, desde que Javier Solana dejó de ser 'míster PESC'. Solana también era 'alto representante', un título muy similar al que ahora tendrá Borrell, pero ahora el cargo está institucionalizado y está a caballo entre la Comisión y el Consejo.
Así es desde finales de 2009, tras la entrada en vigor del Tratado de Lisboa, con el objetivo de reforzar la coherencia y coordinación entre las diferentes carteras del Ejecutivo comunitario, aunque teniendo en cuenta que la UE sigue sin tener oficialmente competencias en política exterior y las decisiones se toman por unanimidad de los 28.
Al alto representante le toca presidir las reuniones de ministros del ramo, buscar consensos, hacer propuestas y asegurar la coherencia de toda la acción exterior de la UE, incluido el comercio y la ayuda humanitaria. Dirige el Servicio Europeo de Acción Exterior, una especie de cuerpo diplomático europeo, y la Agencia Europea de Defensa. Entre 2010 y 2014, otro español, Joaquín Almunia, ocupó una vicepresidencia de peso, la de Economía, en la Comisión que presidía el portugués José Manuel Durao Barroso. El propio Borrell había sido presidente de la Eurocámara, otro de los considerados 'top jobs', durante media legislatura entre 2004 y 2007.
El puesto de alto representante no parecía, inicialmente, el favorito para el Gobierno español, que apostaba por el holandés Frans Timmermans como presidente de la Comisión y eso descartaba a otro socialdemócrata en la cúpula de las instituciones. Sin embargo, finalmente el juego de equilibrios ha vuelto a colocar a un español al frente de la política exterior europea. Además, varias fuentes dudaban del encaje de Borrell en un puesto que implica viajar permanentemente y España parecía apostar por una vicepresidencia política o una económica, teniendo en cuenta, además, que los constantes viajes del alto representante le impiden con frecuencia asistir a las reuniones del colegio de comisarios. El español se ha impuesto al actual vicepresidente de la Comisión, el eslovaco Maros Sefcovic.
Borrell desembarcará en Bruselas tras poco más de un año como ministro de Exteriores del Gobierno de Pedro Sánchez. En funciones desde las elecciones generales del 28 de abril, fue el cabeza de lista del PSOE en las europeas de mayo, algo que ya le señaló como probable candidato español a las instituciones europeas.
Lagarde asumirá las riendas del BCE
En una rueda de prensa, la canciller alemana, Angela Merkel, ha especificado que los nombramientos de Lagarde y Michel al frente del BCE y del Consejo europeo, respectivamente, se han decidido por unanimidad. Alemania ha sido el único país que se ha abstenido en el nombramiento de Von der Leyen como jefa del Ejecutivo comunitario por las reticencias de los socialistas alemanes, socios de Gobierno de Merkel.
Además, la canciller alemana ha anunciado que el candidato del Partido Popular Europeo (PPE) para presidir el Parlamento Europeo será el alemán Manfred Weber.