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lleva ocho años en silla de ruedas
Un joven australiano se queda tetrapléjico después de comerse una babosa tras hacer una apuesta con sus amigos
Sam tenía 19 años cuando hizo una apuesta con sus amigos y se comió una babosa, lo que le provocó una infección en el cerebro que le dejó tetrapléjico. Ahora, el Gobierno australiano ha recortado las prestaciones a las personas con discapacidad en más de un 50%, lo que ha provocado que la familia se endeude por los gastos médicos.
Un joven de 27 años de Sídney lleva los últimos ocho tetrapléjico en una silla de ruedas tras haber hecho una apuesta con unos amigos y comerse una babosa que había encontrado en el jardín de un amigo.
El joven enfermó rápidamente debido a que la babosa estaba infectada por Angiostrongylus cantonensis, un parásito que provoca mengoencefalitis eosinifílica, una infección en el cerebro. Sam Ballard estuvo en coma 420 días y cuando se despertó estaba tetrapléjico, según recoge la prensa australiana.
Su madre tenía la esperanza de que poco a poco volviera a caminar y hablar de nuevo, pero con el paso de los años ha perdido la esperanza. Tres años después de enfermar fue dado de alta y ahora está en una silla de ruedas motorizada.
Sus amigos han recaudado dinero para que Sam pueda tener la atención que precisa 24 horas al día, siete días a la semana. El joven tiene convulsiones u necesita ser alimentado a través de una sonda.
Sam fue elegido en 2016 para percibir un subsidio de discapacidad, pero el año pasado le redujeron la cuantía, pasando de 490.000 dólares a 135.000, lo que ha provocado que la familia se endeude.
Ahora, la familia se enfrenta al Gobierno de Australia para que no recorte en este tipo de prestaciones.
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