Suceso
Un joven queda en estado vegetativo tras hacer una voltereta en un muelle para impresionar a sus amigos
El joven, de 15 años, se encontraba en la playa con sus amigos cuando realizó la voltereta y cayó de cabeza.
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Un joven quedó en estado vegetativo después de realizar una voltereta en un muelle para impresionar a sus compañeros y caer de cara al agua. Los hechos ocurrieron en Stone Pier en Margate, Kent, en Reino Unido.
Jack Dolan, de 15 años, fue a la playa por primera vez y se arrojó para impresionar a sus compañeros. Había hecho este movimiento otras veces, la más reciente durante unas vacaciones en Egipto. Sin embargo, cayó de cabeza en el agua.
El impacto lo dejó inconsciente y le causó daños cerebrales tan graves que los escáneres indican que no se puede reparar. Tras los hechos, su madre Lisa y su padrastro Dave Nolan recaudan fondos desesperadamente para mudarse de casa y poder sacar a Jack del hospital y cuidarlo ellos mismos.
Dave Nolan aseguró que el joven estaba en una "zona gris", donde los expertos no saben cuánto tiempo permanecerá vivió decidiendo que podrían ser semanas o años. "Creo que calculó mal y aterrizó de cara en el agua, quedando inconsciente", dijo.
"Fueron solo tres o cuatro metros y si hubiera aterrizado con un cuarto de rotación en un sentido u otro, probablemente habría estado bien. Por eso no podemos estar enojados con él. Lo había hecho tantas veces antes que no hay culpa alguna. Sé que se estaba riendo, realmente puedo verlo haciéndolo, sonriendo y presumiendo completamente. Lo último que habría sabido es ser feliz", añadió.
Era la primera vez que el joven iba a la playa, ya que solía estar con sus padres la mayoría de ocasiones debido a que, según indican, tenía TDAH y era propenso a actuar sin pensar. "Fue la primera vez que lo dejamos", dijo.
"Siempre le decíamos que no porque éramos muy estrictos. Él tenía TDAH y actuaba antes de pensar. Pero tenía 15 años y queríamos darle un poco más de libertad", explicó al 'Daily Mail'.
Jack estaba con cuatro o cinco amigos y su novia el día del accidente. El adolescente probablemente no se dio cuenta de lo alto que era el muelle, quedó inconsciente y después se ahogó. Una última imagen trágica muestra a Jack apenas media hora antes de que ocurriera, sonriendo mientras llega a la estación de Margate con un amigo.
Su padrastro no quiso concluir sin decir lo orgulloso que estaba de los amigos del joven por sus acciones. Según explicó, uno llamó al 999 mientras su novia contactaba con la madre del joven. Jack fue tratado por paramédicos antes de ser trasladado al Hospital King's College en ambulancia aérea.
"Está recibiendo cuidados paliativos y, aunque su cuerpo está bien, su cerebro está muerto. No puede ir a un hospicio infantil porque hay que estar cerca de la muerte. Está sin soporte vital y respirando, pero no puede hacer nada más", explicó.
La familia, incluidas las hermanas de Jack, Faith, de diez años, y Grace, de ocho, se encuentran actualmente en una residencia municipal y esperan poder mudarse a una casa adecuada para Jack lo antes posible.
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