A la cita de Buenos Aires llegan no solo los jefes de Estado o de Gobierno de las 20 economías más desarrolladas y emergentes integrantes del grupo, sino también de España -país invitado permanente-, Chile y Países Bajos -invitados de Argentina- y altos representantes de organismos internacionales como Naciones Unidas y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Los recibimientos de los mandatarios no han pasado desapercibidas. Ningún representante argentino estuvo presente para recibir al presidente francés, pero si un chaleco amarillo. Macron saludo al único operario que estaba allí, que llevaba una prenda de ropa que identifica al movimiento que ha nacido contra el alza de impuestos al carburante en Francia. Va con 130 personas, tiene dos hoteles bloqueados y han pedido comida vegetariana.
Caso contrario ha sido el del presidente chino, Xi Jingping, recibido por todo lo alto. El mandatario chino ha regalado todo el dispositivo de seguridad para la cumbre: blindados todoterreno, 30 motos, trajes especiales, escáneres antiexplosivos. Ha pedido tener un sitio preferencial en las fotos de familia y en las de la sesión plenaria. Y ha exigido la lista de los periodistas que cubren la cumbre, advirtiendo que no podrán hacerle preguntas.
Putín, está rodeado de muchas medidas de seguridad. Tiene un vigilante en la cocina para ver cómo se preparan los alimentos y francotiradores que cuidan los sitios donde se encuentra.
La seguridad de Estados Unidos es una de las más autónomas, junto a la de los chinos, rusos, turcos y saudíes. Trump trae aviones, armas, coches blindados y la nueva Bestia. El mandatario americano ha llegado con su esposa, su hija y asesora Ivanka y su yerno. También los acompañan el secretario de Estado, Pompeo y el jefe de gabinete de la Casa Blanca, John Kelly.
El príncipe heredero de Arabia Saudita Mohammed Bin Salman, lleva cuatro coches blindados en aviones de carga. Y ha pedido inodoros, bidet y lavabos de la marca inglesa Kohler. Su comitiva es de 400 personas.
Los mandatarios que destacan por su austeridad son Merkel, Shinzo Abe, el holandés Mike Rutte y Theresa May. Las autoridades argentinas han prohibido a todos los indigentes estar en el perímetro de seguridad de la ciudad.
