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Un hombre que quedó en coma tras un accidente de coche en el este de China se ha despertado después de 12 años y lo primero que vio fueron lágrimas en la cara de su madre de 75 años, que había estado junto a su cama día y noche durante más de una década.

Wei Mingying, la cariñosa mujer, se había gastado todos los ahorros de su vida en los gastos médicos de su hijo e incluso había contraído una deuda de 120.000 yuanes (más de 15.000 euros). En un momento dado, era tan pobre que no comió en todo un mes, según ha explicado a 'Beijing News', y sólo bebía agua, lo que le ha provocado que ahora solo pese 30 kilos.

Su hijo, Wang Shubao, quedó cuadripléjico y en coma después de un accidente en 2006, cuando tenía 36 años, y la mujer era la única cuidadora que tenía, puesto que el padre de Wang murió cuando él era joven.

Hasta hace pocos días, Wei comenzaba cada jornada de cuidados a su hijo a las 5 de la mañana: lavar su cara, bañarlo, alimentarlo, ocuparse de sus necesidades del baño, masajearlo y reposicionar su cuerpo para evitar las úlceras.

Un milagro ocurrió el mes pasado cuando ella lo sorprendió sonriéndole un día, una señal de que finalmente había recobrado el conocimiento.

Aunque Wang todavía no puede moverse ni hablar, ahora puede oír a su madre y sonreír en respuesta, según el informe.

Estoy muy contento. Espero que se recupere completamente", dijo Wei. Nunca me rendiré con él.

Espero que un día pueda volver a llamarme "mamá"", dijo ella.

La historia de Wei tocó los corazones de miles de personas en China, y muchos usuarios de la red elogiaron a la madre amorosa.

No hay nada más poderoso que el amor de una madre", leyó un comentario en el sitio chino de micro-blogging Weibo.

Este hombre es un hijo afortunado", dijo otro. "¡Estoy llorando!

Sólo una madre amaría tanto a su hijo", dijo otra.

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