Los 82 migrantes del barco humanitario Ocean Viking, de las ONG SOS Méditerranée y Médicos Sin Fronteras (MSF), desembarcaron en un puerto de Lampedusa, tras seis días de espera en el mar Mediterráneo.
"La espera para los migrantes a bordo del Ocean Viking ha terminado. 82 hombres, mujeres y niños son transferidos por la Guardia Costera italiana a Lampedusa. Han huido de Libia, sobrevivido a la travesía mortal del Mediterráneo, ahora finalmente llegan a un lugar seguro", celebró MSF en las redes sociales.
El barco entró en aguas italianas durante la tarde y se quedó próximo a la costa, pero no atracó en puerto, sino que fueron las embarcaciones de la Guardia Costera italiana las que los llevaron a tierra pasadas las 23.15 horas locales (21.15 GMT).
La ONG confirmó a primera hora de este sábado que el nuevo Gobierno italiano, del Movimiento 5 Estrellas (M5S) y el Partido Demócrata (PD), había autorizado el desembarco, después de que varios países europeos acordaran su reubicación.
Ahora los migrantes esperarán en la isla italiana a ser trasladados a los países que los acogerán, algunos se quedarán en Italia y otros serán recibidos por Alemania, Francia, Luxemburgo y Portugal, tal y como confirmó el ministro del Interior francés, Christophe Castaner, en las redes sociales.
El barco de SOS Méditerranée y MSF socorrió el pasado 8 de septiembre a 50 personas en el Mediterráneo y el 10 de septiembre acogió a otras 34, que habían sido asistidas en el mar por un velero que no estaba en condiciones de mantenerlas en su interior.
En los últimos días, una mujer embarazada de nueve meses y su marido tuvieron que ser evacuados a Malta, y el resto de los 82 migrantes ha esperado hasta este sábado una solución. Entre ellos hay al menos veinte menores, un niño de un año, y una embarazada de ocho meses, confirmó MSF.
El director general de la ONG en Italia, Gabriele Eminente, afirmó en una grabación de vídeo que los rescatados son personas "vulnerables" que han estado en Libia antes de cruzar el Mediterráneo, y en este país africano "han sufrido violencia y en algunos casos torturas".
Al mismo tiempo, reiteró la necesidad de que los países europeos acuerden un mecanismo estructural, que funcione siempre y que permita el desembarco inmediato de los salvados, sin que tengan que permanecer a la espera varios días en aguas internacionales. Por su parte, la ONG SOS Méditerranée expuso que "los rescatados deben ser desembarcados sin demora, en un lugar donde se garantice su integridad física y sus necesidades básicas".
Lamentó que el Mediterráneo central tenga actualmente una "cruel falta de capacidad de rescate, lo que se ilustra con una tasa de mortalidad más alta que nunca" y estimó que en 2019, una de cada 20 personas que salieron de Libia por mar murieron durante la travesía en el Mediterráneo hacia Europa.
El líder de la ultraderechista Liga, Matteo Salvini, condenó que Italia vuelve a abrir sus puertos a los migrantes para convertirse en "el campo de refugiados de Europa", mientras que el líder del M5S y ministro de Exteriores, Luigi Di Maio, matizó que los salvados han podido desembarcar porque la UE acordó su recolocación en países miembros.
El Ocean Viking ya estuvo dos semanas en el Mediterráneo con 356 migrantes a bordo el pasado agosto, hasta que seis países europeos acordaron la reubicación de los auxiliados.
