Al menos 11 civiles murieron hoy por bombardeos del Gobierno sirio contra el sur de la provincia de Idlib, el último bastión opositor en el país mediterráneo, en un momento en el que se intentó un fracasado alto el fuego pactado entre Rusia y Turquía, informaron ONG y Defensa Civil siria.
La zona más afectada fue el pueblo de Al Bara, en el sur de Idlib, en el que perecieron 5 personas, entre ellos tres menores, por bombardeos de Damasco contra la región, testigo de ataques aéreos a diario por una ofensiva, que no fue anunciada oficialmente y que cuenta con el apoyo de su aliada Rusia, desde finales de abril, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
También en el sur de Idlib, concretamente en el pueblo de Al Fatira, perecieron tres civiles, dos de ellos mujeres, así como en la ciudad de Maarat al Numan, donde murieron tres, una cifra confirmada por la Defensa Civil siria, conocida como los "cascos blancos". El Observatorio, cuya sede se encuentra en el Reino Unido pero que cuenta con una amplia red de colaboradores en el terreno, indicó que durante el día de se lanzaron más de 100 ataques aéreos contra Idlib.
Desde el 30 de abril, según la ONG, han muerto 424 civiles, entre ellos 102 niños y 89 mujeres, por los bombardeos de Siria y Rusia en el noroeste de Siria. A pocos kilómetros de esas zonas atacadas, en el norte de la provincia de Hama, al menos 26 miembros de las tropas sirias han perecido por combates contra las facciones insurgentes por el control de esa zona, donde se lleva a cabo la operación militar, según el Observatorio y los grupos rebeldes, aunque los medios oficiales sirios no han reaccionado hasta el momento ante la información.
Esta semana Rusia y Turquía, que apoya a la oposición, sellaron un nuevo alto el fuego, según los medios rusos, aunque poco después de anunciarse hubo ataques y uno de ellos impactó contra un puesto de observación turco. Ankara culpó a Damasco del ataque contra su posición en la zona desmilitarizada sellada el pasado otoño y que abarca el norte de Hama, la mediterránea Latakia, el oeste de Alepo e Idlib. Idlib está prácticamente dominada por el Organismo de Liberación del Levante, la exfilial siria de Al Qaeda, el principal objetivo del presidente sirio Bachar al Asad en el país árabe.