Las Comisión Europea se ha reunido este miércoles por videoconferencia para gestionar la crisis generada por la epidemia del coronavirus. De momento ningún país va a restringir el acceso a sus fronteras de forma inmediata pero, tras la reunión de esta tarde, se ha abierto el canal para poder hacerlo si la situación llega a empeorar.
La alerta en Italia por un brote del coronavirus ha llevado a Bruselas a pedir "de manera proactiva" a los estados miembro una reunión para "iniciar la coordinación", ha indicado en una rueda de prensa en Bruselas una portavoz del Ejecutivo comunitario.
Las reglas del espacio Schengen permiten la reintroducción de controles reforzados en las fronteras interiores solo bajo determinadas condiciones y previa notificación a Bruselas.Entre los criterios que las autoridades nacionales pueden invocar para activar esta vigilancia reforzada está la de "interés público", en cuyo marco podría encajarse una alerta sanitaria, aunque hasta el momento Bruselas no ha recibido "ninguna notificación".
Desde el inicio de la crisis del coronavirus, la Comisión Europea ha insistido en pedir que toda decisión que tomen los estados miembro para responder a la situación sea "proporcionada", esté "basada en la opinión científica" y de acuerdo a una evaluación de riesgo.
"Deben ser proporcionadas a la situación en la zona de aplicación y estar coordinado a nivel europeo", ha subrayado de nuevo este martes la portavoz de la Comisión Dana Spinant, quien ha aclarado que la iniciativa de convocar la videoconferencia parte del Ejecutivo de Ursula von der Leyen pero la organización está en manos de la presidencia de turno de la UE, que este semestre ocupa Croacia.