El coronavirus ha encendido todas las alarmas en Corea del Sur y por eso hasta los traslados de enfermos se hacen en 'cápsulas' de máxima seguridad. De hecho, el espectacular aumento de infectados ha llevado a su primer ministro a reconocer públicamente que las cosas no han funcionado como es debido: "Me siento totalmente responsable y pido disculpas al pueblo"
En apenas 24 horas la cifra de infectados se ha duplicado, pasando de 229 a 433. Por ello, se desinfecta el paso de cualquier sospechoso de tener la enfermedad.
Los principales epicentros del coronavirus en este país son un hospital, una fábrica y una secta cristiana, cuyos 10.000 adeptos han sido puestos en cuarentena.
También preocupa Irán, donde ya se han registrado cinco muertos. La Organización Mundial de la Salud ha mostrado su temor a que la enfermedad se expanda por países con una deficitaria red sanitaria y, en el caso de Irán, sometido a un bloqueo que puede afectar a la llegada de medicamentos desde el exterior.
En China, las cifras han dado un respiro y se ha ralentizado el crecimiento en el número de fallecidos y de afectados. En Wuhan, los médicos se han sorprendido por la rápida recuperación de un bebé de 17 días.
Las autoridades han decidido albergar al equipo médico de esa ciudad en siete cruceros. Enfermeras y médicos han decidido escribir sus nombres en los trajes de aislamiento para poder así reconocerse más fácilmente.