El último día de Donald Trump en la Casa Blanca antes de la investidura de Joe Biden, el presidente de Estados Unidos saliente cede protagonismo a su esposa, la primera dama Melania Trump, que se ha despedido con un mensaje en el que instó a los estadounidenses a "escoger el amor sobre el odio" y "la paz sobre la violencia", pese a que su marido es uno de los causantes de la misma y en un gran ambiente de tensión en el país por el asalto al Capitolio de Estados Unidos del pasado 6 de enero.
"Cuando Donald y yo concluimos nuestro tiempo en la Casa Blanca, pienso en toda la gente que me llevo en el corazón con sus increíbles historias de amor, patriotismo y devoción", dijo Melania Trump en un vídeo de siete minutos distribuido por la Casa Blanca.
"Debemos centrarnos en todo lo que nos une, insistió, superar lo que nos divide, y siempre escoger el amor sobre el odio, la paz sobre la violencia". Pese a las amables palabras, no está previsto que el matrimonio Trump cumpla con una de las tradiciones más duraderas de la investidura y abandonarán la Casa Blanca sin dar la bienvenida a sus sucesores, el demócrata Joe Biden y su esposa Jill.
Se prevé, de hecho, que el presidente saliente y su esposa estén rumbo a su mansión privada de Palm Beach (Florida) cuando Biden asuma la presidencia en una ceremonia formal este miércoles 20 de enero.
En la única referencia aparente en su discurso de despedida al violento asalto al Capitolio, que dejó cinco muertos, por parte de una turba de seguidores de Trump. Melania aseguró que "hay que ser apasionado en todo lo que se hace, pero siempre recordando que la violencia nunca es la respuesta y nunca puede ser justificada".