Al menos cien personas han muerto en los enfrentamientos registrados este jueves entre manifestantes y agentes de las fuerzas de seguridad en Kiev, según el responsable de los servicios médicos opositores. También habría alrededor de 500 heridos.
Por su parte, el ministro de Sanidad ucraniano, ha ofrecido un nuevo balance de los disturbios de los últimos días, elevando a 67 los fallecidos, por lo que serían 39 las víctimas reconocidas oficialmente en los disturbios de esta jornada. Asimismo, ha informado de 117 personas han tenido que ser atendidas hoy por los servicios de emergencia, de las que 69 han tenido que ser hospitalizadas.
A la confusa situación sobre el terreno se suma, además, la retención de decenas de miembros de las fuerzas de seguridad por parte de los manifestantes. Al menos 60 agentes permanecen recluidos en las oficinas de una empresa estatal, cerca del Ayuntamiento de Kiev, según informa el periódico 'Kyiv Post'.
Olga Bohomolets, uno de los médicos que han atendido a doce fallecidos, ha asegurado que las víctimas fueron alcanzadas por disparos realizados con fusiles de gran precisión dotados de munición muy potente que llegó a romperles los huesos. Tras la tregua anunciada el miércoles por la noche al término de la reunión entre el presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, y los líderes opositores, los enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas de seguridad se han reanudado al amanecer en la plaza de la Independencia y las calles aledañas.
Los choques se han producido cerca del Palacio de Octubre ante el avance de los manifestantes hacia el lugar donde estaban apostados los antidisturbios. El diario apunta a que los agentes habrían empleado munición perforante en algunos casos, ya que los chalecos antibala que llevaban algunas de las víctimas presentaban agujeros.