Las inundaciones en las provincias del norte y el este de Sri Lanka han dejado hasta el momento once fallecidos y alrededor de 300.000 desplazados, según fuentes gubernamentales. Los desplazados han sido alojados en 505 centros de beneficencia, según el subdirector del Centro de Gestión de Desastres, Pradeen Kodippili.
Las áreas más afectadas son los distritos de Anuradhapura y Polonnaruwa (norte), según ha manifestado el comandante, Boniface Perera, tal y como informa la cadena de televisión estadounidense CNN.
En el distrito de Polonnaruwa, la ciudad de Medirigirya se encuentra totalmente sumergida bajo el agua. Perera ha indicado que unidades de búsqueda y rescate del Ejército han sido enviadas para llevar a cabo tareas de evacuación.
La intensidad de las lluvias es tal que una barca de rescate en la que se encontraban 17 personas fue arrastrada por las aguas y arrojada debajo de una carretera, rompiéndola en tres partes y dejando al menos cinco muertos --un marine, dos niños de seis y ocho años, un hombre y una mujer--. Las demás personas tuvieron que ser rescatadas por una segunda embarcación.
Por su parte, el Ministerio de Gestión de Desastres ha asegurado que los esfuerzos para aliviar la situación se están acelerando para hacer frente a la situación.
