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LOS VUELOS AÚN SON POCOS Y LOS FERRYS VAN SOBRECARGADOS

Los grandes milagros en la catástrofe natural de Filipinas

Ramón viajó desde Arabia Saudí a Filipinas temiéndose lo peor, pero su familia ha sobrevivido. Los niños del orfanato de Tacloban están todos a salvo. "Son muy valientes", dice su maestra. Estos son algunos milagros que deja la catástrofe.

Madrugada en Cebú. Cientos de filipinos hacen cola para conseguir un ferry. Quieren ir a la isla de Leyte. Quieren saber si sus familias están vivas. Desde hace días desconocen su paradero. Los teléfonos no funcionan. La única manera de conseguir información es adentrarse en la devastada isla.

Ramón Gerardo, por ejemplo, dice que en dos días sólo ha dormido un par de horas; este hombre está muy preocupado por la suerte que haya podido correr su familia. Aunque Ramón ha conseguido pasaje, solo llegar a Cebú le ha costado tres días.

Trabaja en Arabia Saudí, pero su mujer y sus cuatro hijos residen en Leyte. Un viaje largo, porque al barco hay que añadir cuatro horas por carreteras semidestruidas. No sabe qué va a encontrar. Cuando llega, ve que su casa está destrozada, pero su familia ha sobrevivido al tifón.

Además, también existen pequeños y grandes milagros como el del orfanato de Tacloban, donde los cincuenta niños están a salvo. "Estábamos arriba, las olas de cinco metros golpeaban las paredes, la construcción temblaba, había vientos de 300 kilómetros. Pero mis niños son muy, muy valientes", asegura Erlend Johannessen, director del orfanato.

Johannessen añade que tuvieron que aguantar una hora y media viendo cómo el edificio quedaba reducido a dos paredes. "Durante hora y media aguantaron las embestidas de Haiyan. Solo dos paredes del edificio se mantuvieron de pie".

Mientras Johannsen busca un nuevo refugio para los huérfanos en Leyte, muchos recién nacidos y sus madres descansan en una maternidad de Bogo. Jingle es una de ellas, huyó de la inundación hasta que los dolores de parto la sorprendieron. Ahora cumple 21 años y Nica, su hija, acaba de nacer y ya es una superviviente.

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