Muere un cantante tras ser golpeado por negarse a interpretar una canción

El cantante turco Onur Şener ha perdido la vida a los 45 años poco después de ser golpeado en la cabeza por tres individuos a las puertas de un club de música nocturno en Ankara, la capital del país.

Al parecer, el artista estaba sobre el escenario cuando tres hombres le pidieron que interpretase una canción durante su actuación. Uno de ellos, tras interpretarla, no quedó satisfecho con la manera en la que la había interpretado, por lo que pidió que la cantase de nuevo. Sin embargo, Sener, ante la insistencia y las formas de los individuos, se negó y pidió a estos que no interfiriesen en su trabajo durante la noche.

Poco después se produjo una especie de discusión entre las dos partes que finalizó con la expulsión definitiva de la sala de estos tres hombres, acusados de alterar el orden en el interior del club e interrumpir en varias ocasiones el concierto que estaba ofreciendo esa noche el cantante turco.

Ante ello, el trío decidió esperar al artista a las puertas del club para propinarle una brutal paliza con botellas rotas. Le golpearon fuertemente la cabeza y, a consecuencia de las heridas, tuvo que ser trasladado de urgencia al Hospital, donde permaneció unas horas.

Allí, los efectivos sanitarios no pudieron hacer nada más que confirmar su fallecimiento, que ha conmovido al país y ha provocado la indignación en redes sociales.

La Policía ha detenido a los presuntos autores

Rápidamente, se abría una investigación policial en Turquía que se saldaba con la detención de los tres sospechosos. Dos de ellos aseguraron en su declaración haberse metido a separar y culpan a un tercero, Ílker. Este último, sin embargo, lo niega y asegura desconocer quién es el autor de la paliza que ha acabado con la vida de este artista, que deja huérfana a su hija.

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