Una mujer se reencuentra con su madre biológica dos días después de enterarse de que era adoptada

Donna Pavey, una mujer de Texas, tuvo que dar en adopción a su hija Sharon Glidden en 1965 después de que sus padres la consideraran muy joven para criar a un bebé.

Sin embargo, 52 años después, madre e hija han vivido un emotivo reencuentro solo dos días después de que Glidden se enterara de que era adoptada, pero ella nunca olvidó a su bebé. "Desde que la concebí, la quería", indica Pavey, que ahora tiene 70 años. "Recé y recé y cuando vi las fotos de la madre de adopción di gracias al Señor por cuidar de mi niña", dice.

Los padres adoptivos de Glidde, Theodore Hotaling y Edga Gallon, ya fallecidos, nunca le dijeron que era adoptada, algo que a ella no le importó porque indica que "hicieron su misión durante toda su vida, haciéndome sentir querida" y añade que era feliz y que simplemente aceptaba lo que le decían.

Sin embargo, Glidden comenzó a investigar sus raíces porque nunca había tenido una "familia grande", así que mediante una página web trató de hacer su árbol genealógico, según recoge ABC News.

Con ayuda de expertos, se realizó una prueba de ADN que la llevó hasta una hermana paterna y más tarde a su madre, que se había casado y había tenido más hijos en Texas. "Llamé a mi tía de Nueva York y sin terminar de contarle todo me confirmó que era adoptada", cuenta Glidden.

La mujer decidió buscar a su madre y consiguió hablar con ella mediante Facebook justo antes de hacer un viaje de seis horas en coche para conocerla en persona.

Cuando se vieron en persona Pavey repetía que no podía dejarla marchar y una de sus hijas asegura que encontrar a Glidden era lo que su madre necesitaba. "Mi madre siempre ha sido muy buena madre, pero parecía que le faltaba algo", explica su hija.

Ahora Glidden quiere mudarse más cerca de su madre para recuperar el tiempo perdido.