Publicidad

DOCE DÍAS DESPUÉS DE LA MATANZA

El Museo del Bardo reabre sus puertas con la marca de los disparos presentes

El Museo del Bardo de la capital tunecina ha reabierto sus puertas, conservando intactas las marcas que dejaron en sus paredes los disparos y la explosión de granadas ocurridos hace doce días, cuando al menos dos terroristas mataron en su interior a 22 personas, incluidos dos turistas españoles.

Los nuevos visitantes del museo, que alberga una de las colecciones de mosaicos romanos más prestigiosas del mundo,  se han detenido en las escaleras y estancias afectadas por el atentado que conmoción a Túnez para fotografiar los impactos dejados.

Una placa con los nombres de las víctimas preside ahora la entrada al recinto, que cuenta con 8.000 obras de arte, es lugar obligado de paso cultural para los turistas, y fue escenario del mayor atentado terrorista contra civiles ocurrido en Túnez en los últimos 13 años.

La ministra de turismo tunecina, Salma Elloumi Rekik, asegura que se pretende que el museo quede en la memoria como una muestra de la resistencia de su país frente al extremismo.

El atentado está provocando graves perjuicios a un sector tan estratégico para Túnez como el turismo. Muchos cruceros han anulado sus escalas en ese país, y por ejemplo en Francia, que aporta el mayor número de turistas, las reservas han disminuido en un 60 por ciento.

Publicidad