Inglaterra

Un nido de cientos de arañas venenosas en su casa y tres días en coma tras una picadura: la historia de Ivan Savage

La picadura infectada del ex entrenador personal de 60 años le hizo desarrollar una sepsis que casi hace que le amputen el brazo.

Imagen de archivo de una araña

Imagen de archivo de una arañaPixabay

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Ivan Savage estaba en su casa cuando sitió un fuerte pinchazo en el codo derecho, tres días después se despertó de un coma en un hospital al borde de la muerte. Lo que no sabía el ex entrenador personal de 60 años es que vivía acompañado de cientos de falsas viudas venenosas.

Savage reside en un domicilio cercano a un río en la ciudad inglesa de Slough, Berkshire. Él mismo lo describe como un "un caldo de cultivo perfecto" y asegura que se siente muy afortunado de continuar con vida, según el diario 'Mail Online'.

Una picadura letal

El terrorífico capítulo comenzó cuando una noche del pasado agosto este arácnido le causó una dolorosa picadura mientras estaba en su sala de estar. Cuando miró se encontró una araña que llegó hasta su mano mordiéndole otra vez. El ex entrenador llamó a emergencias antes de desplomarse. El veneno se extendió por su cuerpo y desencadenó en una sepsis que casi hace que le amputaran su brazo.

"Recuerdo que me puse de pie con el control remoto del televisor en la mano y vi que River Monsters de Jeremy Wade estaba encendida y esa fue una de las últimas cosas que recuerdo", ha publicado 'Mirror'.

Savage rememora las angustiosas sensaciones que le recorrieron el cuerpo en el momento: "Estaba hirviendo, pero mis huesos se sentían como si estuvieran helados. Estaba viendo cosas en mi visión periférica. Me deterioré bastante rápido. Llamé a los paramédicos, quienes me dijeron que abriera la puerta en caso de que me desmayara. Antes de darme cuenta, los socorristas estaban alrededor y lo siguiente que supe fue que me desperté en el hospital".

Sepsis y un nido de 500 arañas

El veneno se extendió por su cuerpo y desencadenó en una sepsis que casi hace que le amputaran su brazo. Pero para que su miembro pudiese quedar intacto, el inglés tuvo que someterse a una operación para extraer la carne muerta.

Además, durante las dos semanas que p en las que luchaba su vida en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Wexham Park en Slough, un control de plagas realizó una "desintoxicación de riesgo biológico" en su casa. Los informes del equipo revelaron que un nido de "500 viudas falsas" se encontraba en el interior de una de sus ventanas.

El inglés ya no trabaja debido a los problemas de salud que le han causado el grave infortunio y vive con miedo de que este se repita. "Olvídate de XL Bullies, estas pequeñas cosas son letales. Vivo con el temor de que esto pueda volver a suceder", afirma la víctima.

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