Un niño austriaco de 14 años ha sido condenado este martes a dos años de prisión, tras ser declarado culpable de prepararse para unirse al Estado Islámico en Siria y descargar instrucciones para fabricar una bomba casera, que coleccionaba en su Play Station.
El menor de origen turco, que se ha autoinculpado de los cargos, permanecía en custodia preventiva desde el pasado mes de octubre. Del total de la condena, 16 meses han sido suspendidos, según ha informado una portavoz judicial.
El menor fue imputado después de que la Fiscalía austriaca investigara su videoconsola en la que supuestamente guardaba material yihadista. Anteriormente había sido detenido como sospechoso de estar relacionado con actividad terrorista.