En la localidad de Río Bananal, en Brasil, se han perdido 133 dosis de la vacuna contra el coronavirus de CoronaVac. Tras una investigación, se ha determinado que el responsable de este incidente es un niño de 9 años que desconectó los sistemas de refrigeración.

Los hechos ocurrieron el pasado 18 de febrero. Esas vacunas iban destinadas a suministrar la segunda dosis a sanitarios. Sin embargo, no sólo se han perdido las vacunas, también lo han hecho muestras de sangre, pruebas PCR que todavía no habían sido analizadas y otros medicamentos que, al igual que las dosis, necesitan unas condiciones de congelación y refrigeración especiales.

La Prefectura de Río Bananal anunció que se estaba investigando este hecho como un presunto caso de vandalismo. Sin embargo, las imágenes de las cámaras de seguridad han revelado que fue el menor de 9 años quien desconectó los sistemas de energía de las instalaciones de salud.

La coordinadora del proceso de vacunación en esta zona de Brasil, Marcia Venturim, afirmó que se encontraron las vacunas en a una temperatura mucho mayor de la recomendada para asegurar su efectividad, por lo que se han perdido esas 133 dosis.

Para evitar nuevos incidentes como este, se ha decidido conectar los refrigeradores al generador del hospital, así como contratar a un vigilante de seguridad durante la noche para que esto no vuelva a repetirse.

La vacuna CoronaVac es una de las producidas por la farmacéutica china Sinovac y, según los responsables del laboratorio, los primeros estudios parecen ser positivos en cuanto a la efectividad de estas dosis contra las cepas británica y sudafricana.

Brasil en uno de los países más afectados por la pandemia en América. Las autoridades informaron este sábado de que se han superado las 245.000 muertes por el nuevo coronavirus, mientras el número de casos confirmados ya sobrepasa los 10,1 millones. Además, en las últimas 24 horas se han producido 1.212 muertes.