En las imágenes a las que ha tenido acceso en exclusiva para España Antena 3, Amedy Coulibaly amenaza al dueño del supermercado judío. Se trata de las primeras imágenes del interior del supermercado, donde el terrorista aparece con vaqueros, camiseta, chaleco antibalas y va armado.
Uno de los testigos ha asegurado que Coulibaly "comenzó a disparar nada más entrar con su kalashnikov". Tras ello, algunos compradores se esconden en los pasillos, otros en la cámara frigorífica gracias a un empleado de la tienda, un inmigrante musulmán. Sin embargo, el refugio dura poco y Coulibaly exige que suban a la tienda y amenaza con matar a los demás. El dependiente asegura que les dijo a los cliente que podían escapar por el montacargas, pero tuvieron miedo, "dijeron que el ruído los delataría". Uno consigue huir y sus informaciones serán vitales para la Policía.
Dentro, Coulibaly ya ha matado a cuatro personas, entre ellas a un empleado de 22 años que le arrebató un arma, pero se le encasquilló. El yihadista ordena también destruir las cámaras de seguridad y llamar a la televisión. El rehén que telefonea aprovecha para hablar con la Policía. Así se enteran de que el asalto es inminente.
Coulibaly, con un arma en cada mano, y suficientes cartuchos y explosivos para destruir el supermercado, comienza a rezar. Minutos después empieza el asalto.
