Un nuevo brote del virus de Marburgo, similar al ébola, deja 6 muertos y 20 personas infectadas en Ruanda

El Ministerio de Sanidad de Ruanda ha confirmado la presencia de un nuevo brote del virus de Marburgo. Se trata de un virus muy similar al ébola que ha provocado un total de 20 personas infectadas y seis muertos. Este brote se produce tras otros casos detectados y controlados en otros países africanos.

"Se ha identificado una enfermedad con fiebre alta causada por el virus de Marburgo en Ruanda. Hemos contabilizado 20 personas afectadas y seis más que han muerto", ha explicado el ministro de Sanidad, Sabin Nsanzimana.

Un total de 20 personas infectadas se encuentran en aislamiento y están siendo tratadas. El Ministerio de Sanidad llama a extremar la higiene y evitar el contacto cercano con personas que presenten síntomas como fiebre alta, dolor de cabeza severo, dolor muscular, náuseas y diarrea.

Las autoridades sanitarias trabajan en el rastreo de contactos y en realizar pruebas diagnósticas. Además, la cartera ha destacado la implementación de "medidas preventivas reforzadas en todos los centros de salud".

La mayoría de casos se han producido en la capital del país, en Kigali. La embajada de Estados Unidos ha pedido a sus empleados que teletrabajen al menos durante esta semana.

¿Qué es el virus de Marburgo?

El virus de Marburgo es una fiebre hemorrágica viral altamente infecciosa de la misma familia que el ébola. África fue escenario de dos epidemias de este virus: una en Guinea Ecuatorial, que dejó 17 casos confirmados, incluidos 12 fallecidos, y otra en Tanzania, con al menos nueve casos, ocho confirmados y uno probable.

El virus ataca rápidamente al sistema inmunológico y daña los vasos sanguíneos, provocando hemorragias internas y externas. Fue identificado por primera vez en 1967 durante dos brotes simultáneos en Alemania y Serbia, asociados con monos verdes africanos. Desde entonces se han registrado múltiples brotes en África, especialmente en Angola, la República Democrática del Congo y Uganda.

Principalmente se propaga de los murciélagos frugívoros a los humanos y, después, entre personas a través del contacto con fluidos corporales como sangre, saliva, orina o sudor. Esto incluye también el contacto con superficies contaminadas, como ropa o equipos médicos.

Entre sus síntomas se encuentra fiebre alta, dolor muscular, dolor de cabeza intenso, diarrea, vómitos y dolores abdominales. Y, a medida que la enfermedad progresa, pueden aparecer hemorragias por diferentes orificios del cuerpo.

Para prevenir el virus es importante evitar el contacto directo con este tipo de murciélagos. Asimismo, se recomienda utilizar guantes, mascarillas y batas. Al igual que el ébola, este virus puede provocar la muerte en pocos días con un periodo de incubación de dos a 21 días y una tasa de mortalidad de hasta el 88%. Pese a que no exista un tratamiento específico, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha asegurado que se están desarrollando una serie de productos sanguíneos, fármacos y de terapias inmunitarias para lograr combatir su enfermedad.

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