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IRÁN | PARA LOS PRÓXIMOS CUATRO AÑOS

El nuevo presidente Hasan Rohani jura su cargo ante el Parlamento iraní

El clérigo chií moderado Hasan Rohani ha tomado posesión del cargo ante el Parlamento persa. Toma las riendas de un país muy condicionado por las sanciones internacionales, a causa de su programa nuclear. Los iraníes esperan de él que despeje las relaciones con Occidente para salir de la crisis económica.

El nuevo presidente de Irán, Hasan Rohani, ha jurado su cargo ante el Parlamento para los próximos cuatro años y se espera que dé a conocer este mismo domingo la composición de su Gobierno, del que ha dicho que estará formado por personalidades de todo el espectro político.

La Agencia Laboral de Noticias Iraní (ILNA) ha difundido la lista del gabinete planteado por Rohaní, que tendrá que confirmar el Parlamento, que ya ha anunciado que no ratificará a ministros de reconocida trayectoria reformista.

A partir de ahora, tiene dos semanas para presentar el Gobierno al Parlamento. La ceremonia, retransmitida en directo por la televisión pública, se ha celebrado en el Majlis, y a ella han sido invitados por primera vez dirigentes extranjeros.

El nuevo presidente de Irán se ha comprometido a respetar la Constitución y proteger la religión oficial de la República Islámica de Irán. Rohani persigue una mayor flexibilidad con Occidente para poner fin a las sanciones que acosan la economía del país.

El clérigo fue elegido con el 51% de los votos. Sucede a Mahmud Ahmadineyad, a quien ha reprochado "concentrar la hostilidad con la comunidad internacional". Pero para países como Israel no hay diferencia entre ambos mandatarios.

"El presidente puede haber cambiado pero el objetivo del régimen no. La intención de Irán es desarrollar su capacidad nuclear con el propósito de destruir Israel", ha asegurado el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu.

Sus próximos cuatro años de mandato mostrarán si el nuevo presidente de Irán es más moderado que su precedesor. Por el momento le ata su fidelidad al régimen de Al Assad y su dependencia a la autoridad suprema del país, el ayatolá Jamenei.

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