Las cámaras de seguridad del autobús proporcionaron la información necesaria para detener a los asesinos, y a otros delincuentes implicados en el suceso. En total, seis personas.
Todo ocurrió en un autobús público, en Quito. Un padre y su hijo viajaban con un maletín que contenía, supuestamente, 20.000 dólares retirados minutos antes de una entidad financiera.
Todo transcurre con tranquilidad, hasta que de repente dos hombres se abalanzan sobre el padre y su hijo con la intención de robarles el maletín.
Los dos forcejean y tratan de evitarlo mientras los pasajeros se van retirando, asustados al ver la dimensión de la pelea.
De repente, los delincuentes sacan armas. Disparan una vez a la espalda del padre, que sigue luchando.
Aprovechando el momento, los ladrones arrastran al hijo fuera del autobús y consiguen llevarse la maleta, mientras el padre recibe un segundo balazo en la espalda y sale, ensangrentado, tras los ladrones.
Ambos murieron a consecuencia de los disparos.
