Papa Francisco
El papa Francisco, tras su hospitalización: "Unas horas más y no estoy seguro de haber estado para contarlo"
Según una fuente cercana al papa, el pontífice habría estado inconsciente y en riesgo de muerte durante su hospitalización por bronquitis en el hospital Gemelli de Roma hace dos semanas.
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El papa Francisco estaba inconsciente cuando lo llevaron al hospital de urgencia hace dos semanas con bronquitis, según Michele Ferri, una fuente cercana al Vaticano. Además, esta fuente asegura que podría haber muerto. Al parecer, el papa le dijo a Ferri que "unas pocas horas más y no estoy seguro de que hubiera estado presente para contarlo". Michele le respondió "¡nos diste un susto!".
El papa -de 86 años- parecía tener buena salud durante las celebraciones de Pascua la semana pasada. Sin embargo, fue trasladado al hospital Gemelli de Roma el 29 de marzo, para posteriormente ser dado de alta a los tres días.
Michele Ferri mantuvo una conversación con el papa el pasado sábado, en la que asegura que su voz sonaba mejor que en la anterior charla mantenida en el mes de enero, donde parecía erar "muy cansado". Ferri es citado constantemente por los medios italianos por ser alguien que mantiene un contacto estrecho con el papa regularmente. Esta relación comenzó desde que Francisco lo llamó por primera vez para consolarlo tras la muerte de su hermano, asesinado en un robo hace diez años.
Según fuentes del Vaticano, la visita del papa al hospital estaba programada. El periódico italiano 'Corriere della Sera' señaló que se trataría de "problemas cardíacos y dificultad respiratoria", pero destaca que la situación hasta el momento "no es preocupante".
Tras su alta el sábado ya puede volver a realizar todas las funciones y participar en todas las celebraciones de Semana Santa, excepto el servicio al aire libre del Viernes Santo en Roma, que según el Vaticano se saltó por el clima frío.
El papa lava los pies a doce presos
El papa Francisco volvió este jueves a la prisión en la que hace 10 años inició el rito de la misa "In coena domini", en la que cada Jueves Santo lava los pies a doce presos como recuerdo del gesto que tuvo Jesús con sus doce apóstoles antes de ser crucificado.
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