Guerra Israel-Hamás

Una bomba mata a un periodista palestino y a su familia y sus compañeros se derrumban en directo

Sus compañeros cuentan la noticia completamente emocionados mientras el reportero se desprende de todo el equipo antibalas como reivindicación del miedo y la desprotección que sufren.

Periodistas llorando la muerte de un compañero

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En la ciudad de Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, el periodista de la cadena Palestina TV Mohamed Abu Hatab junto a once miembros de su familia, incluyendo su esposa, su hijo y su hermano, perdieron la vida tras un devastador bombardeo lanzado por el Ejército de Israel. El incidente ocurrió el pasado jueves por la noche, lo que marcó un triste capítulo en el conflicto que asola la región.

Había hecho un directo una hora antes de su muerte

Mohamed Abu Hatab, quien estuvo trabajando en una transmisión en vivo tan solo una hora antes de su trágica muerte, se convierte en el cuarto periodista de la cadena en perder la vida en los bombardeos que se iniciaron el pasado 7 de octubre.

En total, más de 30 periodistas de la cadena han sido víctimas de esta escalada de violencia, según reportes de la agencia de noticias palestina Wafa. Además, los ataques perpetrados por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han cobrado la vida de otras 15 personas en la ciudad de Gaza, incluyendo el destacado periodista Mohamed al Bayari.

En un sombrío panorama, las autoridades del enclave palestino, bajo el control del grupo islamista, han informado que el número de palestinos fallecidos debido a la ofensiva del Ejército de Israel contra la Franja de Gaza ha superado los 9.000. Por su parte, las autoridades israelíes han confirmado alrededor de 1.400 muertes y más de 240 secuestrados como resultado de la incursión de Hamás en el sur del país. La violencia continúa cobrando un alto precio en la región, dejando un legado de devastación y dolor en ambas comunidades involucradas en el conflicto.

La reacción de sus compañeros de cadena

Sus compañeros de profesión y de cadena dieron la noticia de su muerte en pleno directo, algo que provocó la emoción y las lágrimas del reportero y de la periodista que se encontraba en plató, que no pudo aguantar la tristeza y la devastación que sintió en ese momento.

El reportero que había proporcionado la información terminó la retransmisión totalmente desprotegido ya que, a medida que fue dando la noticia, fue quitándose el chaleco antibalas, el casco y los demás elementos de protección como símbolo de denuncia y reivindicación ante la desprotección que sufren los periodista en esta guerra y el miedo constante que sufren.

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