Detención en EEUU

Pillan a un joven con una mochila llena de balas y dispuesto a atacar una universidad de Florida

John Hagins ha sido arrestado por intentar provocar una masacre en el campus de la Universidad de Embry Riddle Aeronautical en Florida.

Publicidad

John Hagins, un joven estadounidense, ha sido detenido por la Policía por intentar provocar un tiroteo masivo en el campus de la Universidad de Embry Riddle Aeronautical, en Florida.

La Policía dio con el joven antes de que se produjese la tragedia.

Hagins ha sido arrestado al salir de su apartamento portando una mochila que contenía un rifle semiautomático plegable, cientos de balas y cartuchos de munición, según ha podido confirmar la policía de Dayonta Beach (Florida). El sospechoso fue detenido a las 9:30 hora local.

Detenido gracias a unos mensajes de Snapchat

La detención se ha producido debido a que Hagins mandó a dos estudiantes una serie de mensajes a través de la aplicación Snapchat que indicaban que tenía la intención de provocar "un Columbine", haciendo referencia a la masacre de 1999 que acabó con la vida de decenas de personas en Columbine High School de Colorado.

"Por la gracia de Dios, esos dos estudiantes se adelantaron y frustraron ese plan", declaraba en rueda de prensa el jefe de la Policía de Dayonta Beach, Jakari Young.

"Hemos arrestado en Embry Riddle a un estudiante que planeaba disparar en el campus universitario el último día de clase antes de las vacaciones de invierno”, escribía en Twitter el jefe Young.

Más tarde se han presentado cargos contra el autor del intento de la masacre por los delitos de terrorismo, amenazas escritas de herir o matar e intento de homicidio en primer grado.

El joven subió mensajes a redes sociales en los que se podía observar que iba a llevar a cabo un tiroteo masivo el último día de clase de la universidad.

"Terminé mis compras escolares", este es uno de los mensajes que escribió el detenido en alusión al rifle plegable que llevaba en la mochila con cientos de balas y cargadores de munición. Hagins ha confesado la autoría de los mensajes, aunque ha dicho a las autoridades que todo era una broma.

Publicidad