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HABÍA GENTE CON ATAQUES DE PÁNICO
Un piloto de EasyJet pide a los pasajeros que voten a mano alzada si quieren que vuele el avión pese a los problemas en el motor
Un vuelo que iba a Bristol se retrasó durante 36 horas por problemas técnicos. Pero cuando los pasajeros pensaban que los problemas habían acabado, el piloto les explicó que solo había un 50% de posibilidades de que los dos motores funcionaran y les pidió que decidieran ellos si querían volar. EasyJet niega los hechos y asegura que “en ningún momento el piloto llevó a cabo una votación entre los pasajeros sobre si debía o no volar el avión". Y afirma que nunca harían volar un avión sin el correcto funcionamiento de ambos motores.”
Los pasajeros de un vuelo de EasyJet que cubría la ruta entre Málaga y Bristol han contado el terror que vivieron dentro de un avión que fue retrasado dos días.
El piloto de la aeronave comunicó a los pasajeros que fueran ellos quien, mediante una votación, decidieran si querían volar hasta Bristol teniendo en cuenta que solo había un 50% de posibilidades de que los dos motores funcionaran.
Las palabras del piloto generaron estrés entre los 150 pasajeros, algunos de los cuales incluso sufrió ataques de pánico, e incluso miembros de la tripulación acabaron entre lágrimas por la situación.
Tras varios días de desconcierto al no poder volar a Bristol por problemas con la aeronave, los pasajeros pensaban que su pesadilla habría acabado, pero cuando montaron en el avión se encontraron con la explicación del piloto que les indicó que uno de los motores no funcionaba. Según los testigos, el piloto salió de la cabina para explicar la situación y pidió que levantaran la mano aquellos que querían que intentara volar el avión.
Tras permanecer durante más de una hora encerrados en el avión, el ambiente comenzó a ponerse tenso pues había gente llorando, gritando y pidiendo bajar de la aeronave. "Había 12 personas que querían seguir, pero el resto queríamos bajarnos", explica Terri Hal, una de las pasajeras, según el medio Bristol Post.
"Fue absolutamente horrible", dice Jemma Hoper, una mujer que viajaba con su marido y sus cuatro hijos. "Meten a la gente en un avión roto para parecer que lo están intentando", añadió.
"El piloto dijo que nunca había hecho nada parecido en 37 años de profesión", explica otro testigo, que añade que les dio la opción a los pasajeros de decidir qué querían hacer. "Solo unos pocos querían intentarlo, querían llegar a casa. Pero la mayoría no quiso. Había chicas hiperventilando y mucha gente con ataques de pánico".
Tras una larga espera, un portavoz de EasyJet dijo que el vuelo se iba a retrasar debido a problemas técnicos. "Nuestro equipo de ingenieros trabajó duro para tratar de conseguir que los pasajeros llegaran a su destino lo antes posible", aseguró.
EasyJet desmiente esta versión de los hechos y en una nota asegura que “siguiendo un procedimiento habitual en el mundo de la aviación, el piloto intentó utilizar el primer motor para activar el otro. Siendo consciente el piloto que el vuelo tenía ya un retraso considerable por un problema técnico, preguntó a los pasajeros si preferían salir un rato o permanecer en el avión mientras se llevaba a cabo el encendido del segundo motor. Finalmente, debido al problema técnico y priorizando la seguridad de los pasajeros y la tripulación, EasyJet decidió transportar a los pasajeros con otro avión”.
Además, la empresa aérea afirma que “en ningún momento el piloto llevó a cabo una votación entre los pasajeros sobre si debía o no volar el avión. Asimismo, EasyJet nunca volaría un avión sin el correcto funcionamiento de ambos motores.”
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