Una pistola, una mordaza y 6 millones en joyas: Comienza el juicio por el robo a Kim Kardashian

La popular influencer estaba sola en la suite de un apartahotel de lujo situado en el barrio de la Madeleine. Estaba invitada a varios eventos relacionados con la Semana de la Moda de París. El guardaespaldas había salido para acompañar a su hermana, Kourtney Kardashian, a una discoteca. Ese fue el momento aprovechado por los ladrones. Varios de los atracadores, disfrazados de policía, retuvieron al vigilante del hotel. Después llegaron a la habitación de Kim. Cuando ella se dió cuenta de que lo estaba pasando intentó utilizar su teléfono móvil para pedir auxilio. En ese momento uno de los ladrones la apuntó a la cabeza con una pistola. Después fue amordazada, atada y colocada dentro de la bañera.

Los atracadores se hicieron con el anillo que el raper Kanye West había dado a Kim Kardashian para pedirle matrimonio. Una joya con un diamante de 19 quilates y valorada en unos cuatro millones de euros. También se llevaron otras joyas para completar un botín valorado en unos nueve millones de euros. Todo ocurrió en 10 minutos.

Los 'yayoladrones'

Un año después, en enero de 2017, los ladrones fueron detenido. Atracadores, según la prensa, de poca monta, algunos se desplazaron en bicicleta la noche del robo. Casi todos tenían entonces una edad elevada, por encima de los 60 años. Se les empezó a conocer como los "yayoladrones". Algunos de ellos tienen ahora probemas de salud. Otros ya han fallecido. De hecho, el considerado como el cerebro de la banda era Aomar Ait Khedache, alias 'Omar el Viejo', hoy de 70 años. Ahora está casi sordo y con problemas para hablar, con una discapacidad reconocida del 80 %.

Los diez acuasados comparecen libres, ya que cumplieron el período de prisión preventiva. Otro de los acusados, Yunice Abbas, que fue identificado gracias a su ADN, declaró esta semana al canal TF1 que su objetivo era dar "un último golpe" para poder retirarse sin apreturas económicas. Este hombre de 72 años, que dice que recibió 70.000 euros por el golpe, se llevó en bici el botín en una bolsa, que se le cayó mientras pedaleaba. Tuvo que recoger las joyas de la calle antes de continuar su huida.

400 periodistas acreditados

Con las prisas y la oscuridad, dejó sobre el asfalto un collar, que fue recuperado en la calle. El resto de las joyas no volvieron a ser vistas, y se cree que fueron vendidas en Bélgica, posiblemente en el entorno del mercado de diamantes de Amberes, según la investigación. Abbas publicó en 2021 un libro titulado 'Yo secuestré a Kim Kardashian', en el que reconocía que ni siquiera estaba al corriente de la identidad de su víctima. Ahora afirma que tiene "muchas posibilidades" de acabar entre rejas, por lo que aprovecha el tiempo con sus nietos.

La propia Kardashian tiene previsto prestar declaración el 13 de mayo, en una jornada que se prevé aún más multitudinaria en un proceso para el que se han acreditado más de 400 periodistas, muchos de ellos extranjeros, según fuentes judiciales. Un total de diez acusados comparecerán en el banquillo de los acusados de un proceso que se desarrollará en el monumental Palacio de Justicia de la isla de la Cité y concluirá con el veredicto del 23 de mayo.

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