Más de 70 personas han resultado heridas, tres de ellas de gravedad, como consecuencia de los disturbios entre policías y grupos violentos durante la manifestación del 15-O en Roma, según han informado las autoridades.

La Policía italiana ha cargado contra los manifestantes en la céntrica plaza de San Giovanni debido a las agresiones de grupos de manifestantes violentos infiltrados en la marcha, mayoritariamente pacífica. Durante los enfrentamientos han sido incendiados varios vehículos, incluido un furgón policial.

Los agentes han empleado gases lacrimógenos y cañones de agua para dispersar a los cientos de jóvenes encapuchados que se han enfrentado a las fuerzas de seguridad en la zona de la basílica de San Juan de Letrán y la Vía Merulana, donde levantaron barricadas con contenedores de basura. Mientras, el primer ministro, Silvio Berlusconi, ya ha prometido que perseguirá a los culpables.

Más de 4.000 personas en Londres
Los organizadores de la manifestación de protesta del 15-O celebrada este sábado en el centro Londres han cifrado en entre 4.000 y 5.000 las personas que han secundado la convocatoria.

Uno de los manifestantes, Jane McIntyre, ha asegurado que tiene previsto permanecer ante la catedral de San Pablo, donde están concentrados, todo el tiempo que sea posible. "La gente está diciendo basta ya, queremos una democracia real, no una que se base en los intereses de las grandes empresas y del sistema bancario", ha explicado McIntyre en declaraciones publicadas en la edición digital del diario 'The Guardian'.

Ambiente festivo en Bruselas
Unas 10.000 personas según los organizadores y alrededor de 6.200 según los cálculos de la Policía han recorrido hoy las calles de Bruselas secundando la convocatoria mundial de los indignados.

Las pancartas, escritas principalmente en español, francés e inglés, lanzaban mensajes contra los líderes políticos, contra la gestión de la crisis financiera y contra el sistema capitalista de modo más general.