La Policía española detiene a dos delincuentes reclamados por la justicia inglesa

La colaboración entre la Policía española e inglesa sigue dando excelentes resultados. El pasado miércoles el Grupo de Operaciones Especiales detuvo en Málaga y en Tenerife a dos de los fugitivos más peligrosos y buscados por las autoridades británicas. Su detención se hizo efectiva gracias a la investigación de la división del crimen organizado de la Policía nacional.

La organización británica Crimestoppers, dedicada a  informar a la Policía del posible paradero de los delincuentes gracias a las llamadas telefónicas de los ciudadanos, difundió esta misma semana las imágenes de estos dos criminales. El teléfono comenzó a sonar. La eficacia fue plena.

La Costa del Sol es uno de los mejores lugares para que los fugitivos británicos pueden esconderse de la justicia. Ahora, gracias al trabajo de la Policía y a este tipo de organizaciones, el territorio español  comienza a ser menos deseado.