La Policía identifica a Omar Abdelhamid el Hussein como el responsable de los atentados

El primer atentado fue el sábado por la tarde cuando el terrorista abrió fuego contra las personas que participaban en un acto sobre libertad de expresión en el que estaba el caricaturista sueco Lars Vilks, amenazado de muerte por publicar caricaturas de un perro con la cabeza de Mahoma.

Un documentalista, Finn Norgaard, falleció por los disparos y tres personas más resultaron heridas. Poco después, el atacante se dirigió a una sinagoga y mató a uno de los guardias de seguridad e hirió a dos policías. La Policía ha detallado que El Hussein intentó entrar en el centro cultural a través de varios accesos antes de matar a Norgaard en las afueras del edificio con una pistola que fue localizada posteriormente en un campo de fútbol en Mjoelnerparken.

Asimismo, ha indicado que las dos armas utilizadas en el ataque en la sinagoga estaban en posesión de El Hussein cuando fue tiroteado por los agentes cerca de la estación de Norrebo. La oposición política ha reclamado la apertura de una investigación para determinar si la Policía y los servicios de Inteligencia podrían haber evitado los atentados.

El jefe de los servicios de Inteligencia, Jens Mdsen, ha reconocido que El Hussein estaba "en el radar" de las autoridades y que se trabaja sobre la teoría de que se inspirara en los ataques ejecutados en enero en París.