Un inversor estadounidense y su pareja tailandesa que se instalaron en una casa flotante frente a la costa de Tailandia se enfrentan a una posible pena de muerte después de que las autoridades del país asiático les acusaran de violar su soberanía nacional. Chad Elwartowski y Supranee Thepdet, ambos inversores de la critpomoneda Bitcoin, se encuentran en paradero desconocido tras haber pasado varias semanas en un cubículo instalado en febrero a unas 12 millas náuticas de la costa de Phuket, popular destino turístico del sur de Tailandia.
El habitáculo, de unos 6 metros de diámetro, era la prueba piloto del proyecto Ocean Builders, impulsado por emprendedores que, según su página web, promueven el llamado "seasteading" o asentamientos flotantes permanentes fuera de aguas territoriales. La idea no gustó a la Marina tailandesa, que el lunes presentó una denuncia en una comisaría de Phuket al considerar que los dos violaron el artículo 119 del código penal que regula las agresiones a la integridad nacional y que prevé la pena capital o la cadena perpetua en caso de culpabilidad.
"Querían crear una comunidad con el fin de convertirla en un estado independiente dentro del territorio marítimo de Tailandia," alegó la Marina en un comunicado en su página de Facebook en el que indicaron que para ello trataban de aprovechar vacíos legales en la Convención sobre el Derecho del Mar de la ONU (UNCLOS). El portavoz de la comisaría del distrito de Wichit, donde la Marina presentó la denuncia, Rattanachai Siangsanor, dijo que la investigación del caso ha sido transferida a la Policía provincial y que de momento no se ha emitido ninguna orden de arresto contra la pareja.
Vivimos unas semanas en una casa flotante y ahora Tailandia quiere matarnos"
"Es ridículo. Vivimos unas semanas en una casa flotante y ahora Tailandia quiere matarnos", dijo Elwartowski en un mensaje en su cuenta de la misma red social en la que aseguró que ni él ni su pareja participaron en el diseño, la construcción o financiación de la vivienda marina. Elwartowski es un informático que trabajó para el gobierno de EEUU en Afganistán e Irak e hizo fortuna invirtiendo en Bitcoin, al igual que su pareja, conocida también como Bitcoin Girl Thailand, y que utiliza el apodo Nadia Summergirl.
"Nadia y yo aún estamos a salvo", añadió el inversor el martes en su última entrada en la misma red social. Contactado hoy por Efe a través de correo electrónico, Elwartowski evitó hacer comentarios sobre las acusaciones y sobre su situación. Ocean Builders avaló la versión de la pareja, a la que calificó en un comunicado de "voluntarios entusiasmados ante la perspectiva de vivir en libertad" que se limitaron a documentar sus vivencias durante su estancia en la casa flotante.
Los promotores señalaron que apostaron desde el principio por el Bitcoin y que utilizaron los beneficios en el proyecto marino en el que hasta el momento han invertido 150.000 dólares, pero aseguraron que entre ellos no está Elwartowski, y también negaron las denuncias de la marina tailandesa de que el habitáculo interfería en el tráfico de barcos mercantes o pesqueros. El colectivo, que el pasado 10 de abril hizo un llamamiento para atraer inversores y ampliar el proyecto hasta una veintena de viviendas, anunció la suspensión de sus actividades "hasta que se aclare la situación". Las autoridades indicaron que están haciendo los preparativos para retirar la casa flotante del mar.
También te puede interesar...
El bitcoin ya está obsoleto aunque el 'blockchain', las transacciones con dinero virtual, seguirán vigentes
Acusan a un fondo de la desaparición de 11 millones de euros de algunos inversores que se querían enriquecer con bitcoins