El expresidente de Estados Unidos Barack Obama ha dejado a un lado su habitual discreción política para pronunciar un discurso en el que, por primera vez, ha mencionado el nombre de su sucesor, Donald Trump, para advertir de que el país vive tiempos "peligrosos" y "extraordinarios" y llamar a la acción tanto de ciudadanos como de políticos.
"No debería ser una cuestión de partido decir que no se debe presionar al fiscal general o al FBI para usar el sistema judicial como garrote contra la oposición política. O pedir explícitamente al fiscal general que proteja a compañeros de partido ante procesamientos", ha afirmado Obama, en evidente alusión a los mensajes lanzados por Trump en los últimos meses.
Desde la Universidad de Illinois, Obama ha subrayado que "no es normal" que los propios republicanos no salgan en defensa de las instituciones democráticas, toda vez que lo considera hipócrita. "¿Tan difícil es decir que los (simpatizantes) nazis son malos?", ha planteado el exmandatario, que desde que abandonó la Casa Blanca ha optado por un perfil bajo y solo ahora parece dispuesto a implicarse en actos de partido.
Obama dará su apoyo a candidatos para las elecciones parlamentarias de noviembre, en las que ve la "oportunidad" de "restaurar una mínima apariencia de cordura en la política" de Estados Unidos. Así, ha instado a los estudiantes presentes en la sala a participar: "No podéis sentaros y esperar a vuestro salvador".
Trump cree que Obama trata de atribuirse el mérito de la mejora económica
"Al final, la amenaza a nuestra democracia no viene solo de Donald Trump o de la actual bancada de republicanos en el Congreso, (sino que) la mayor amenaza para nuestra demcoracia es la indiferencia. La mayor amenaza para nuestra democracia es el cinismo", ha apostillado.
Trump se ha apresurado a responder a las palabras de Obama y lo ha hecho desde Dakota del Norte, durante un mitin en el que ha restado valor al discurso. "Lo vi, pero me quedé dormido. Creo que era muy, muy bueno para dormirse", ha ironizado entre las risas de los presentes.
El actual presidente ha considerado que su predecesor está intentando "atribuirse el mérito" de la mejora económica y ha advertido de que, si los demócratas hubiesen mantenido el poder en los comicios de noviembre de 2016, el país acumularía datos económicos "negativos".
Obama se ha referido a los supuestos éxitos de Trump durante su discurso para advertir precisamente de que dichos avances no son nuevos. "Cuando oyes lo bien que va ahora la economía, hay que recordar cuándo comenzó la recuperación", ha dicho, antes de proclamar que fue su Administración quien logró remontar los datos de empleo.